Mañana cumple un mes el conflicto entre el gremio de los empleados municipales (Suoem) y el intendente Ramón Mestre por la creación del Ente de Servicios y Obras Públicas (Esop). En estas cuatro semanas, la tensión nunca dejó de incrementarse, y la atención municipal nunca dejó de reducirse.

Toda la administración y los servicios están paralizados. El ciclo lectivo ya se da por concluido en las escuelas municipales y en los centros de salud se respetan las guardias mínimas, pero los turnos son azarosos, al igual que buena parte de las cirugías. El plan de pagos en marcha debió ser prorrogado, ya que

Ayer ambas partes ratificaron que seguirán tirando de la cuerda. Tanto desde el Ejecutivo como desde el gremio confirmaron que no hay ninguna vía de negociación abierta, y admitieron por igual que el conflicto será largo.

El Suoem hizo otra multitudinaria asamblea en la explanada del Palacio 6 de Julio, y anunció que el jueves próximo, a la hora de la reasunción del intendente Mestre, marchará en señal de luto hasta el lugar del acto.

“No importa adónde asuma el intendente, allá vamos a ir. Porque el 10 de diciembre será un día de luto para la ciudad. Vamos a ir todos de negro, con banderas, vestidos de negro, y ataúd. Queremos que el país se entere que la ciudad de Córdoba está de luto porque asumen quienes van a enterrar a esta ciudad”, vociferó ayer Rubén Daniele, titular del Suoem.

Un día después, el viernes 11, el gremio prevé una masiva marcha contra el Esop. Daniele anticipó que ya comprometieron su apoyo Luz y Fuerza y ATE, y afirmó que posiblemente debute ese día una multisectorial contra el ente. Además, se mantienen las asambleas de tres horas por turno en todas las reparticiones.

Réplica municipal

A la presión gremial, desde el Ejecutivo respondieron ayer con un anuncio de 10 multas al Suoem, cada una de 12.500 pesos. Desde el Tribunal de Faltas advierten que si las multas no son pagadas, serán descontadas de la cuota sindical que el municipio les retiene a los municipales y luego gira cada mes al Suoem.

Ayer en el municipio, funcionarios de Recursos Humanos estaban en una tarea contrarreloj para cargar manualmente los descuentos que se ampliarán a cada trabajador por las asambleas, además de la eliminación de horas extras y prolongaciones de jornada.

Los mestristas consideran fundamental para que comience a menguar la adhesión a las medidas de fuerza que los municipales sientan en el bolsillo esos descuentos el viernes próximo, cuando cobrarán el salario de noviembre. Advierten que los descuentos pueden representar hasta un tercio del sueldo.

Desde las inmediaciones al despacho de Mestre, aseguran que el intendente no evalúa en ninguno de los escenarios posibles la chance de dar marcha atrás con el Esop. “Ramón tiene en claro que en esta pelea se juega su futura gestión. Es una pelea por el poder municipal y Mestre está dispuesto a darla”, indican.

Con insistencia, en los despachos municipales se escucha un velado reproche a los fiscales de instrucción de Córdoba. Entienden que hay amenazas y actos gremiales que justifican una actuación de oficio. Lo concreto es que tampoco se conoce que los abogados del municipio solicitaran la intervención judicial, y que el Suoem en esta ocasión se abstuvo de perpetrar los destrozos de otras ocasiones o causar daños patrimoniales.

“El ente es peor que la megaordenanza de Germán Kammerath y el contrato de Tecsa. Los dos terminaron derogados después de meses de conflicto”, retrucan desde el Suoem. Desde el municipio se anticipó que en los próximos días se conocerán más medidas tendientes a poner coto a la protesta.