La empresa Agua y Saneamientos Argentinos (AySA) realizó este jueves una audiencia pública en Tecnópolis donde confirmó que el año que viene los usuarios deberán hacer frente a casi un 50% de aumento dividido en dos etapas: la primera será en enero con un alza del 17% y la segunda llegará en mayo, con un incremento del 27%.

Según Ana Carolina Herrero, la defensora del Usuario del Ente Regulador de Agua y Saneamiento (ERAS), esas dos subas arrojan que el incremento anual acumulado será del 48,5%.

Según el informe de AySA, publicado en el sitio del ente regulador ERAS, la factura media por mes antes de impuestos por los servicios de agua y cloacas evolucionará de la siguiente manera: residenciales en barrios de coeficiente zonal alto (513.496 usuarios) pasará de $415,6 a $486,3 en enero y a $617,6 en mayo. Residenciales de barrios de coeficiente zonal medio (936.633 usuarios) pasará de $371,6 a $434,8 en enero y a $552,2 en mayo. Residenciales de barrios de coeficiente zonal bajo (899.457 usuarios) la factura pasará de $366,5 a $428,8 en enero y a $544,5 en mayo de 2019.

"Es importante que los usuarios conozcan los beneficios de la Tarifa Social del Agua, dado que se dio un cambio sustancial en el esquema de subsidios de forma progresiva", dijo Herrero en la audiencia pública.

El incremento del 17% a partir del 1 de enero es para compensar inflación prevista de 2018 (15%, de los 26% que aumentó en mayo de este año), y de 27% a partir del 1 de mayo, de acuerdo a previsiones de inflación para 2019.

AySA aplicó una suba del 300% en sus tarifas en 2016, 23% en 2017. En 2018 aumentó un 26% dividido en un 6% para recuperar la inflación del 2017, un 15% por la suba prevista para 2018 y 5% por recomposición tarifaria. Por ende, se trata de 32% de incremento, número por debajo de la inflación real del año.