"Tenemos paciencia, pero si no hay reactivación habrá confrontación"

Uno de los tres secretarios generales de la CGT, Juan Carlos Schmid, sostuvo que la central gremial continuará "teniendo paciencia hasta que el Gobierno encuentre la forma de llegar a la reactivación económica el año próximo" pero advirtió que si esto no ocurre "inevitablemente habrá una confrontación".

"Todo lo que hemos negociado (con el gobierno) es para tender un puente, un paliativo para llegar al año que viene con una reactivación económica, pero si no funciona, inevitablemente habrá una confrontación", aseguró el dirigente al reconocer que la central sindical "ya no tiene la misma reacción que antes porque la cosa no está funcionando".

En declaraciones a radio Nacional, Schmid, quien cerrará hoy el acto con el que finalizará la movilización hacia el Congreso que la CGT junto con movimientos sociales realizará esta tarde en respaldo de la sanción de una ley de emergencia social, afirmó que la central obrera "ha sido muy cuidadosa y muy prudente al expresar las tensiones que se están acumulando en este primer año de gobierno", ante una situación que "se está tensionando al extremo".

También aseguró que el acuerdo entre el gobierno y los empresarios "no ha funcionado" al recordar la cifra de 120.000 despedidos en los últimos meses, según cifras oficiales, y dejó en claro que la movilización de hoy contiene "otros reclamos, como el fin de los despidos y suspensiones".

Consultado sobre el proyecto de reforma del impuesto a las Ganancias que será debatido en la Cámara de Diputados antes de fin de año, dijo que a la CGT no le "satisface" porque el gobierno "no habló" con la central gremial, a pesar de que "es la que pone la plata".

"No conocemos el proyecto y no conocemos el alcance. Hay que llamar a todo el mundo", reclamó Schmid.

• Marcha

La CGT, la Corriente Federal de Trabajadores (CFT) y distintos movimientos sociales se movilizarán mañana hacia el Congreso Nacional en demanda de la aprobación definitiva de la Ley de Emergencia Social, a la que hoy otorgó media sanción el Senado, ratificaron los organizadores.

Los trabajadores se concentrarán desde las 13 en Belgrano y Entre Ríos, y en 9 de Julio y Avenida de Mayo, para marchar hacia el Congreso, donde se realizará el acto a partir de las 16.

La CGT ratificó que la marcha será "un nuevo llamado de atención para el Gobierno nacional, porque un tercio de pobres en el paíno beneficia ni a los ricos ni a esos pobres".

En la marcha participarán la CGT, la Corriente Clasista y Combativa (CCC), la Confederación de Trabajadores de la EconomíPopular (Ctep), el Movimiento Evita y Barrios de Pie, además de la Confederación General Económica (Cgera), la Federación Económica de la Ciudad de Buenos Aires (Feciba) y la Asociación Bancaria (AB), que encabeza la Corriente Federal de Trabajadores, cuyas columnas se concentrarán a las 14.30 en Reconquista y Sarmiento.

Los tres partidos que integran el Frente de Izquierda no participarán en la marcha porque sería "lavarle la cara" a "una burocracia" que "pactó para no hacer un paro nacional" y a otros sectores "que siguen detrás de la agenda del Papa Francisco", en clara referencia a los trabajadores de la economía popular.

La Central de Trabajadores de la Argentina Autónoma (Ctaa) que lidera Pablo Micheli, aseguró esta tarde en un comunicado que los dirigentes de la corriente acompañarán mañana a los movimientos sociales para denunciar otra vez "el ajuste y la precarización".

"Ante el panorama de creciente pobreza, desempleo y pérdida del poder adquisitivo que afecta a todos los trabajadores, aunque más duramente a quienes cumplen tareas en la informalidad y en la economía popular, la Ctaa y las organizaciones sociales y sindicales reclamarán al Gobierno nacional y a las provincias la inmediata declaración de la Emergencia Social y Laboral", afirmó.

También los gremialistas del sector exigirán "la reapertura de paritarias, que los salarios mínimos y los planes sociales sean equivalentes a los ingresos necesarios para vivir y un aumento de emergencia para los jubilados", indicó el documento de prensa.

La adhesión de Micheli pareció ser simbólica, ya que el "acompañamiento" de mañana será de dirigentes y no de columnas de manifestantes, en tanto la CTA que conduce el docente Hugo Yaskyno se expresó hasta el momento si se sumará o no a la protesta.

Por su parte, los referentes de las principales organizaciones sociales ratificaron hoy que debe haber "una agenda para los humildes, porque hay dos o tres líde pobreza en el país".

"Este año fue muy malo. Es preciso ofrecer una señal desde la calle al Gobierno y al Congreso Nacional", puntualizaron.

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