Tras el descongelamiento, sigue la tensión entre petroleras y Energía y no descartan más subas

Tras el descongelamiento, sigue la tensión entre petroleras y Energía y no descartan más subas

El Gobierno autorizó un alza del 4% en combustibles, que rige desde hoy.

El congelamiento de los combustibles duró apenas un tercio de los 90 días que había pautado el Gobierno. Energía autorizó ayer un incremento del 4% que comenzó a regir esta medianoche e implicará un nuevo golpe al bolsillo en medio de la escalada inflacionaria.

Tras la denuncia penal en su contra que realizaron las empresas de bioetanol, el secretario Gustavo Lopetegui cedió a las presiones de las empresas y provincias petroleras, que buscaban adecuar sus ingresos tras la fuerte devaluación y la suba de la cotización global del crudo y a las denuncias de desabastecimiento de las estaciones de servicio del interior de país. Pero las compañías plantean que el ajuste es insuficiente y descartan que garantice el abastecimiento. En el Ejecutivo desmienten las cifras privadas pero no descartan más subas en octubre.

Con el aumento avalado ayer, el litro de nafta súper en las estaciones porteñas de YPF trepa de $43,71 a $45,46 y el de gasoil, de $40,54 a $42,16. En simultáneo, Energía otorgó un aumento del 5,58% en el precio del barril reconocido a los productores de petróleo no integrados, como Vista, Tecpetrol y Pluspetrol, entre otras firmas que no poseen negocios en toda la cadena del sector, como ocurre con YPF y PAE.

Pese a esta decisión, el decreto que pautó el congelamiento hasta el 12 de noviembre sigue en pie. El Ministerio de Hacienda se valió de la propia letra de esa normativa que habilita a la Secretaría de Energía a avalar subas de precios de forma discrecional "en la medida en que las circunstancias lo ameriten".

La causa aducida fue "la volatilidad internacional del precio del petróleo", que el lunes se disparó 14% desde los US$60,15 hasta los US$68,60 a raíz del "ataque sufrido por las infraestructuras petroleras de Arabia Saudita". Pero lo cierto es que el martes y el miércoles el crudo Brent, de referencia en Argentina, cedió hasta los US$63,50, por lo que la brecha entre el precio que perciben los productores del mercado local y la paridad global se explica hoy más por la devaluación que por el valor del Brent.

Para las empresas consultadas por BAE Negocios, la medida es sólo un leve alivio "insuficiente". Aseguran que el aumento concedido apenas cubre US$2 de la brecha de US$20 que hay entre el precio que perciben las petroleras con el valor que habría en caso de libertad total de mercado, con lo que el "atraso en el precio" todavía está cerca del 30%. Es decir, una compensación equivalente a la que había ofrecido Energía este lunes a cambio de que las compañías renuncien a la judicialización del congelamiento.

En el Gobierno tienen otros números. Según supo este diario, consideran que el desfase de precios es en realidad del 15%, la mitad. Esta discordancia está en el centro de la discusión ya que determina cuánto podrían subir los combustibles el 13 de noviembre, una vez vencido totalmente el congelamiento. Con todo, en Energía no descartan nuevos ajustes en octubre si los precios internacionales vuelven a subir y ampliar la brecha.

Entre tanto, la cámara de los propietarios de estaciones (Cecha) plantea que la medida no garantiza el abastecimiento. Carlos Gold, su presidente, dijo que "va a traer un leve alivio pero no creemos que sea la solución porque el desfase que aducen las productoras es muy grande". "Por eso, va a seguir habiendo problemas de abastecimiento, sobre todo en las estaciones blancas (las que no están asociadas con las petroleras y nutren a pueblos de todo el interior del país), que no pueden pagar el precio mayorista que sí está liberado", evaluó.

Comentá la nota