Los choferes de la línea 60, que mantuvieron interrumpido el servicio durante ocho días en reclamo de mayor seguridad laboral tras la muerte de un mecánico, pusieron en duda el restablecimiento total para mañana, ya que “sólo se hizo la verificación técnica a 40 de los 344 coches”.

“Hoy tenemos 20 coches disponibles de cada cabecera, es decir 40 coches de un total de 344, menos de un 10 por ciento del servicio”, afirmó Esteban Simonetta, delegado general de los trabajadores de la compañía. Recordó que “nunca se hizo un paro, sino que se abandonaron las tareas a partir de la irresponsabilidad patronal tras la muerte del mecánico Daniel Ramallo”.

El delegado apuntó que comenzaron el día de trabajo con esa cantidad de coches y que en el transcurso de la jornada se harán las restantes verificaciones técnicas, que finalizarían mañana. “No creo que lleguemos a funcionar completos para el martes, sino recién miércoles o jueves”, dijo Simonetta, quien informó que las autoridades se habían comprometido a que la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) realizara una revisión técnica de todas las unidades antes de volver a funcionar.

Si bien la intención era retomar el servicio el viernes pasado tras el dictado de conciliación obligatoria por parte del Ministerio de Trabajo, los colectivos “no estaban en condiciones porque no hubo revisión técnica”, señalaron fuentes sindicales, por lo que la primera unidad partió recién el sábado pasadas las 8.15 de la mañana. Hasta ayer sólo funcionaba el ramal Fleming, uno de los 19 que tiene asignados la empresa.