El Ministerio de Transporte de la Nación llamó a dialogar a los intendentes del Alto Valle que cerraron filas contra la traza del tren a Vaca Muerta. La cartera a cargo de Guillermo Dietrich anunció para este año el llamado a licitación del denominado Tren Norpatagónico, aunque restan las confirmaciones pertinentes a un proceso de esta magnitud.

Según trascendió, Transporte de la Nación organizó tres jornadas con los intendentes que levantaron sus voces en contra del paso del ferrocarril por zonas urbanas de sus localidades. Se cumplirán en la sede de Trenes Argentinos Infraestructura, el organismo que tiene a cargo la realización de los estudios técnicos del proyecto que responde al objetivo de bajar los costos de la producción petrolera y gasífera no convencional.

La convocatoria les llegó a los jefes municipales de Campo Grande, Chimpay, Chichinales, Choele Choel, Cinco Saltos, Cipolletti, Contralmirante Cordero, Coronel Belisle, Darwin, General Cervantes, General Enrique Godoy, General Fernández Oro, General Roca, Ingeniero Huergo, Mainqué, Regina y Río Colorado.

Los intendentes hicieron escuchar sus quejas con un escrito consensuado que llegó a manos de las autoridades de Transporte. Es por eso que desde la cartera intentarán despejar las dudas y trazar una hoja de ruta aceptada por los jefes comunales.

3000 puestos de trabajo se generarán en la reactivación.

La ejecución del proyecto del Tren Norpatagónico demandará unos cuatro años, según las previsiones del gobierno nacional. Se licitará con el modelo de gasociación público-privado.

En el texto reconocían la “importancia estratégica para el interés nacional que implica la explotación de los yacimientos de la formación Vaca Muerta”, pero dejaron sentada su “preocupación por la falta de consulta acerca de esta obra y el impacto del movimiento de personas y bienes al proceso de un desarrollo urbano sustentable”.

El tren requerirá una inversión cercana a los 780 millones de dólares, según las previsiones que difundió la cartera de Dietrich. Se plantea la recuperación de unos 700 kilómetros de vías, como así también la incorporación de tecnología moderna al sistema. La traza que se eligió es la de la vieja línea Roca, que acumula unos 40 años sin registrar inversiones de ningún tipo. La licitación está prevista por el modelo de asociación público-privado.