Esto de tener la rutina trastocada, en el encierro adentro de los hogares, provoca entre otras cuestiones que se genere una mayor cantidad de basura. Tanto porque se consumen más alimentos de lo habitual como porque muchos aprovechan este “tiempo muerto” para poner orden en el hogar. En consecuencia, muchos sacan más basura a la calle.

 

Según los registros municipales, durante la última semana ingresaron al relleno sanitario de barrio Las Lomas 347 toneladas de residuos más de lo habitual. Entre lo trasladado en los camiones de Cliba y Urbafe —las dos empresas concesionarias del servicio—, ingresaron al relleno entre el 20 y el 25 de marzo 1.916 toneladas, que se levantaron de las veredas y paseos de la ciudad. Mientras que en el mismo período de febrero —la semana del 20 al 25— las empresas recolectaron 1.569 toneladas de residuos.

 

A esto se le suma que en sí, los santafesinos registran consumos por encima de los recomendados a nivel internacional. Ya que se generan al año más de 400 kg. por habitante de residuos sólidos, que tienen como destino final el Complejo Ambiental, ya sea para su deposición final o para ser reciclados por la ONG Dignidad y Vida Sana. Allí, la recuperación de residuos es baja, ronda el 25% de lo ingresado a dicha ONG en 2018, según el último informe Santa Fe Cómo Vamos.

 

Por otra parte, “pedimos que al sacar la basura usen doble bolsa y la rocíen con solución diluida de hipoclorito de sodio”, ya que “esto ayuda al personal que trabaja en la calle levantando la basura y está expuesto al riesgo de contagio”, señaló Edgardo Seguro, secretario de Ambiente municipal.

 

No diferenciada

 

Como medida sanitaria en esta emergencia, la Municipalidad dispuso que todos los residuos, tanto los secos —se sacan lunes y jueves— como los húmedos —se sacan el resto de la semana, menos el sábado— se depositen en el relleno sanitario, sin pasar por la planta de separación ubicada en el ingreso al Complejo.

 

Esta medida es para evitar el contagio de Covid-19 de los 85 trabajadores de la Asociación Dignidad y Vida Sana, que realizan la separación para vender los residuos secos que luego son reciclados y reutilizados. Dicha tarea cociste en abrir las bolsas de basura que llegan a sus manos a través de una cinta transportadora y separar los residuos reutilizables del resto, que luego termina en el relleno.

 

Por estos días, en la planta de separación sólo se están recibiendo durante la emergencia los residuos que llegan en un transporte especial desde los denominados “grandes generadores”, como supermercados e industrias, que en su mayoría llevan cartón y plásticos. Y para paliar el impacto económico que esta medida tiene sobre el bolsillo de los miembros de la cooperativa el gobierno local no descarta la posibilidad de brindarles una ayuda económica.

 

Además de esta medida, ahora la Municipalidad pide a la ciudadanía que evite retirar escombros y ramas que se generan producto de las tareas de mantenimiento del hogar, para no sobrecargar la labor de los recolectores, que están expuestos al riesgo de contagio.

 

“Pedimos que al sacar la basura usen doble bolsa y la rocíen con solución de hipoclorito de sodio” Edgardo Seguro, secretario de Ambiente municipal

 

 

Cifra: 1.916 toneladas de residuos ingresaron al relleno sanitario entre el 20 y el 25 de marzo

 

Doble bolsa

 

Quienes presenten síntomas compatibles al Covid-19 (fiebre, tos o dificultad respiratoria) o están en cuarentena, deben sacar la basura con doble bolsa y rosearla con solución de hipoclorito. Y si lo hace toda la población, es mejor.

Los recolectores, tan héroes como los sanitaristas

 

Al igual que los médicos y el resto de los trabajadores de la sanidad, como las fuerzas de seguridad, otros “héroes en este lío” son los recolectores de residuos, que pese a la posibilidad de contagio del covid-19 por exposición social, salen todos los días en los camiones a juntar la basura domiciliaria por las calles de la ciudad.

 

Las empresas concesionarias del servicio —Cliba y Urbafe— dotaron a los trabajadores de elementos de protección, como guantes de nitrilo, lentes, barbijos, roseadores con agua lavandina y alcohol en gel. Pese a estas medidas de higiene y seguridad el riesgo es latente. Por lo tanto está en cada ciudadano la responsabilidad de lo que saca a la calle. Hay que pensar en el otro.

 

Si en el hogar hay alguien en cuarentena o con síntomas compatibles al Covid-19 (fiebre, tos seca o catarro) se deben tomar medidas para alertar a los recolectores: colocar doble bolsa en el caso de los primeros, y bolsa roja, los segundos. Además, hay que rosearla con solución diluida de hipoclorito de sodio.

 

Y a la hora de sacar ramas y escombros, hay que pensar en estos trabajadores esenciales que no tienen la posibilidad de quedarse en casa para protegerse de contagio, y entonces, evitar hacerlo.

 

Al relleno sanitario 18 toneladas del viejo Iturraspe En el marco de colaboración de la Municipalidad de Santa Fe con el gobierno provincial en la puesta a punto del viejo Hospital Iturraspe, ubicado sobre bulevar Pellegrini al 3400, se sacaron 18 toneladas de basura en las tareas de limpieza que se realizaron en las últimas horas. En total se llenaron seis camiones, a razón de tres toneladas por cada uno, con material descartado del hospital, que fue depositado en el relleno sanitario. Cabe recordar que la provincia está poniendo a punto distintos sectores de ese inmueble que quedó en desuso cuando se inauguró el nuevo Iturraspe, en la zona norte de la ciudad. Ahora, fue dispuesto como lugar de internación de posibles infectados por coronavirus.