La verdad sobre la operación de Juntos por el Cambio contra el Pami

La verdad sobre la operación de Juntos por el Cambio contra el Pami

El organismo compró un alcohol en gel específico para hospitales. 

Diferentes medios opositores salieron, casi en conjunto, a sostener que el PAMI había hecho una compra con sobreprecio de alcohol en gel en medio de la pandemia del coronavirus. Tanto en Clarín, La Nación, como en el programa de Eduardo Feinmann, se conoció esta supuesta "denuncia" que fue rápidamente desmentida. 

La farmaceútica macrista, Sandra Pitta fue una de las primeras que anunció un sobreprecio en la compra de alcohol en gel para el hospital. Incluso, la diputada Graciela Ocaña propagó la noticia a través de redes sociales. El supuesto sobreprecio es a través de una compra que se llevó adelante el pasado 2 de abril, en plena aislamiento social obligatorio,  en el que se pagó 1.086,57 pesos por cada uno, mientras que, según denuncian los dirigentes y personas cercanas a Juntos por el Cambio el valor el alcohol en gel está muy por debajo de ese precio. 

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Sin embargo, la realidad marca que no son el mismo producto. Según pudo averiguar El Destape con fuentes cercanas al PAMI, el alcohol en gel necesario es de un cartucho específico llamado  "Soft care" y no es un alcohol en gel común sino todo lo contrario, ya que es un modelo específico para la protección adecuada del hospital.

Los repuestos son para el hospital César Milstein que se está preparando para la contingencia y ya tiene instalado un modelo específico de dispenser que necesita un insumo específico.  La clave en la dificultad de la búsqueda, es que se necesita un dispenser de pared para recargar el paquete que ya está cerrado. Cualquier otro tipo de alcohol en gel como los que se venden en farmacias, no permitiría hacer una manipulación del producto adecuada y que se podría contaminar todo el contenido y violaría las condiciones sanitarias necesarias para el trabajo del hospital. 

Por otro lado, ante los faltantes a nivel mundial, el PAMI tomó la decisión de hacer una compra directa y de urgencia para hacer que a los hospitales no le falte nada de caa a la crisis que se avecina. Solo se presentó un oferente que fijó un precio de 1086 pesos por sachet -especal- de 800 mil para el dispensador necesario en el hospital.

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