Tras reanudarse el servicio de taxis y remises, que duró casi 24 horas y perjudicó la movilidad de cientos de pasajeros, el conflicto por la llegada de las aplicaciones digitales de transporte, sigue sin resolverse. El oficialismo defiende a capa y espada el expediente propulsado por la edil de la Coalición Cívica, Angélica González, que busca legalizar otras alternativas de movilidad.

A sabiendas que, el Ejecutivo no abrió ni abrirá ningún canal de diálogo con los manifestantes, quienes fueron denunciados por interrumpir el tránsito en diversos puntos neurálgicos de la ciudad -Estación Ferroautomotora, zona de Playa Grande y el microcentro- y bloquear el acceso por la ruta 2. 

En ese contexto, el apoyo al intendente de General Pueyrredon, Guillermo Montenego, sumó adeptos y se multiplicó. El senador provincial por Juntos, Alejandro Rabinovich, respaldó la postura de no aceptar "aprietes" y "extorsiones", y justificó la presentación judicial del Municipio ante los perjuicios ocasionados a la comunidad marplatense. "Esto no es una acción judicial que inicia el intendente de una forma suelta, todo se judicializa cuando se ve que el accionar de un grupo perjudica a la ciudad y a los trabajadores", sentenció. 

"Montenegro no tira la pelota afuera. Escucha a la gente, y si ve que hay una problemática, elige resolverlo. No aceptamos la extorsión ni el secuestro de los otros trabajadores que se tienen que movilizar por la ciudad", aseveró Rabinovich, quien desechó cualquier tipo de acuerdo o conciliación con las entidades que agrupa a los taxistas y remiseros. Entidades que, según él, tuvieron el acompañamiento del Municipio cuando lo necesitaron. 

"La tarifa diferencial nocturna, extender la vida útil de los vehículos, la entrega de un GPS, supervisado por el Centro de Operaciones y Monitoreo, fueron algunas medidas efectivizadas por el Honorable Concejo Deliberante, para mejorar el servicio público", destacó el senador por la Quinta Sección electoral de la provincia de Buenos Aires.