La comisión directiva y el cuerpo de delegados del Sindicato Obrero de la Cerámica de Azul, Filial 13 de la F.O.C.R.A, emitió ayer un comunicado de prensa para dar a conocer los motivos que en su opinión hacen que el conflicto en Cerámica San Lorenzo no se solucione.

“¿Por qué seguir ajustando?”

En la planta, los trabajadores siguen de paro en reclamo por los obreros despedidos, estando a la espera de que alguien los escuche frente a la actitud -que no se ha modificado- de la parte empresaria de despedir empleados.

Desde la entidad gremial, entendieron que Cerámica San Lorenzo “debe acordar garantizar la continuidad laboral y la prestación de tareas de los trabajadores que están actualmente cumpliendo funciones”.

“La negociación de la organización de trabajos a futuro ante nuevas inversiones tecnológicas, en caso que existan, se debe realizar de buena fe, con la empresa produciendo y con la totalidad de los operarios trabajando, no como se pretende, efectuando más desvinculaciones”, afirmaron.

A continuación informaron que la empresa procedió al cierre definitivo de las plantas de “Revestimiento cerámico” y “Corte y rectificado”, donde prestaban tareas 94 personas.

Recordaron asimismo que a la fecha se han desvinculado por retiro voluntario, no avalados por el gremio, 20 trabajadores más de otros sectores, que “no tienen relación directa con la denuncia realizada en el Ministerio de Trabajo del cierre de las plantas mencionadas”.

Consignaron también que “en la actualidad trabajan 230 trabajadores en forma normal y habitual, no existiendo ningún trabajador sin realizar tareas, más aún, hay sectores que realizan horas extras por falta de personal” y por eso se preguntaron: “¿Por qué seguir ajustando?”.

“La empresa manifiesta falsas promesas y expectativas laborales externas a quienes se desvinculan”

Entonces sostuvieron que “es evidente que a la empresa nada le resulta suficiente, pretendiendo continuar con 26 despidos más y la explotación del resto de los trabajadores sin haber realizado inversiones en nuevas tecnologías”.

En el comunicado emitido por el Sindicato Obrero de la Cerámica de Azul, también destacaron que “la empresa manifiesta falsas promesas y expectativas laborales externas a quienes se desvinculan, porque la realidad es que ellas no se concretan y los desocupados agotan sus indemnizaciones en gastos diarios de consumo”.

Advirtieron además que “el trabajo que se ofrece en las otras plantas del grupo, que distan a más de 1000 kilómetros, es irracional. Además, la situación laboral transita carriles de ajustes en los planteles del personal como sucede en la planta de Azul”.

Finalmente expresaron que “las entidades gremiales, fueron creadas para defender la dignidad del trabajador, haciendo respetar derechos adquiridos, salarios dignos y plena ocupación, nunca que el trabajador se lo tome como la única y primera variable de ajuste en la cadena productiva, como se pretenden en este caso”.