El Gobierno nacional estudia incrementar los reintegros que fueron recortados en agosto de 2018 en alrededor un 50% o volver con los reembolsos, que se eliminaron con un decreto de necesidad y urgencia en diciembre de 2016. Estas dos alternativas son estímulos para que las exportaciones se orienten por estas salidas. Estiman que el uso de los puertos en la Patagonia mostró un descenso del 50% desde que se quitaron en forma progresiva los distintos beneficios.

Los nueve puertos involucrados en la iniciativa gubernamental son: el de San Antonio Este en Río Negro, los de Puerto Madryn y Comodoro Rivadavia en Chubut, Puerto Deseado, San Julián de Punta Quilla y Río Gallegos en Santa Cruz, y los de Río Grande y Ushuaia en Tierra del Fuego.

El Puerto de San Antonio, uno de los ejes para la reactivación

En tanto, el portal digital Río Negro abordó la situación particular del Puerto de la provincia sureña, como una condensación de lo que ocurre a nivel general. En ese sentido advierten que se perdieron muchas cargas en las últimas temporadas, no solo por la crisis frutícola sino también porque muchas de las exportaciones salieron por otros puntos del país como Bahía Blanca, Buenos Aires y puertos chilenos, entre otros.

“Fue una de las propuestas que elevamos junto con la gobernadora al ministro Kulfas para mejorar la competitividad de nuestro puerto”, indicó el ministro de Producción y Agroindustria de Río Negro, Carlos Banacloy. El funcionario señaló al medio que “estamos trabajando con el Gobierno Nacional para ver cómo es que se puede aplicar esta mejora. La iniciativa fue presentada a principios de año y tuvo una buena respuesta por parte del Ejecutivo”.

Por otra parte, el diputado nacional por Río Negro, Martín Soria, presentó un proyecto de Ley para recuperar los reembolsos por exportación derogados por decreto en noviembre de 2016.

El documento prevé que los beneficios alcancen a los productores primarios de peras y manzanas a través de un Fondo Solidario que se nutriría con el 8% del reintegro. Según cálculos privados y tomando en cuenta este índice, el Fondo tomaría anualmente poco más de 1.200 millones de pesos por año.