El Gobierno descansa sobre éxitos, aun en su estrategia "prueba-error", respecto del mapa paritario. A esta altura del año, las negociaciones cerradas, si bien incluyen claúsula gatillo por inflación, están dentro de sus previsiones. La consideración no solo incluye el techo del 20% sino también los conflictos previsibles, con los docentes en primera fila. Pasa por el acuerdo de Uocra, Smata, Comercio, sobrevuela el pacto rubricado con el sector lechero y hace la plancha respecto de metalurgia. En la construcción 21 puntos y cláusula gatillo, mecánicos con el 6,4% para el trimestre de abril a junio y una mejora de casi 13% para semestre, mercantiles con 20% en dos tramos.

Respecto a los lecheros,la estrategia ya desarrollada con los docentes de aprovechar fisuras sindicales para aumentar la presión hizo destrabar el conflicto de Sancor, a razón de $450 millones que según los críticos, sólo ponen a resguardo los sueldos por corto plazo fijo.

Para acercar el rescate a SanCor se hizo

prevalecer el criterio de modificar el convenio

El texto sobre el acuerdo lechero resaltó el compromiso de las partes, "la modernización del convenio colectivo" y una modificación del aporte patronal permanente. Para lo expuesto por Cambiemos se privilegió así impulsar el desarrollo y la competitividad. La asistencia financiera mencionada para Sancor Cooperativas Unidas llegó entoncs "en el marco de un plan de reestructuración sustentable que permita su desarrollo", ninguna sorpresa para el sindicato Atilra o pequeños productores.

Una de las vigilias más complicadas encuentra a la UOM y su "negociación referencial", hasta hace poco tiempo, sumida en la férrea tesitura empresaria para no tomar riesgo alguno en el pacto, mantener el 20%, como techo, cielorraso y zinguería alguna a salvaguarda de cualquier derrame.

El sindicato de Antonio Caló reclama el 30%, bajaría 3 puntos para calmar las aguas, pero ni siquiera la petición de una suma a cuenta tuvo eco empresario. Espejo con reflejos no gratos para los textiles, especialmente, el empresario del sector Teddy Karagozian exaltó, en diálogo con el ciclo "Toma y Daca" (Radio Con vos) que este año "la industria solo puede dar el 0% de incremento". Como ya reseñó BAE Negocios en varias ocasiones, tal definición la expresaban los negociadores patronales metalúrgicos, acotando algún que otro epíteto respecto de la pata sindical.

Trocha angosta

Ningún secreto existe en cuanto a que la Casa Rosada camina con prudencia, aún en su tónica, respecto de los sindicatos de Transporte. La promesa de modificaciones en la quita salarial por Ganancias, todavía pendiente, no llega a proyectar sombras sobre otros tópicos. De hecho, tanto la Unión Ferroviaria de Sergio Sasia, La Fraternidad de Omar Maturano, como el resto de los sindicatos del sector, firmaron con empresas y la cartera de Transportes un acuerdo salarial "marco", que rige desde el 1 de abril hasta el 30 de junio. A cuenta de resolver su paritaria. Durante enero febrero y marzo los trabajadores cobraron una suma "no remunerativa" pactada en diciembre del año pasado. Ese importe, en relación a cada ingreso se elevó en un 50%, mientras que el 12 del próximo mes tendrá que definirse entre las partes la escala salarial definitiva, con la cual los gremios esperan que el porcentaje a pactar incluya el retroactivo por el semestre.

Los sindicatos ferroviarios renovaron

una suma fija y vuelven a negociar en junio