Diego Lanese.

Durante el fin de semana, la ministra de Trabajo de la provincia de Buenos Aires Mara Ruiz Malec sinceró una situación que se vive en el marco de las paritarias 2020. Según la funcionaria, la prioridad de la gestión de Axel Kicillof “está en poder sostener la estructura de gasto e inversión que incluye y es mayoritariamente, salarios y puestos de trabajo”, marcando que la negociación salarial con lo estatales este año deberá esperar. En medio de la crisis por el coronavirus, la mayoría de los trabajadores del Estado bonaerense no tuvieron aumento de sueldo, o tuvieron acuerdos parciales que ya se vencieron, como los médicos del sistema público. Los dichos de la funcionaria pusieron en alerta a los gremios del sector, que tomaron con resignación la decisión.

La dirigencia sindical entiende la “situación extraordinaria”, pero reclaman que haya alguna alternativa para que los salarios no queden tan retrasados respecto a la inflación. En tanto, en el Estado nacional la situación es similar, y un informe remarcó que de noviembre del 2019 a julio de este año la caída de los ingresos de los estatales supera el 20 por ciento.

Los dichos de Ruíz Malec fueron tomados con preocupación por parte de los gremios, que si bien entienden la situación compleja que se vive remarcan que los salarios están “muy atrasados”. “Hasta ahora sólo se discutió el cierre de la paritaria 2019, pero de los salarios de este año no hay novedad”, le explicó a Gestión Sindical una fuente del gremio ATE.

“El tema es que un auxiliar de una escuela cobra 25 mil pesos, otros incluso menos, no pueden dejar sin aumentos a todos esos trabajadores”, alertó la misma fuente consultada. La pandemia generó un congelamiento de la discusión salarial, en especial en los primeros meses del aislamiento. A partir de la extensión de la situación, se comenzaron a agilizar las negociaciones, y hoy ya firmaron sus acuerdos alrededor de un millón de trabajadores registrados.

“La paritaria de la ley 10.430, que representa a los enfermeros y auxiliares de la educación”, no tienen acuerdo cerrado, y apenas tuvieron un bono en abril por realizar tareas en la pandemia, que no alcanzó a todos”, agregó la misma fuente del gremio ATE consultada.

Luego de confirmar la suspensión de la discusión salarial, la ministra de Trabajo aclaró que “en la medida que haya más posibilidades la Provincia va a evaluar todo lo que pueda hacer para mejorar los salarios públicos”, y que eso dependerá de cómo avancen en las próximas semanas los números de la provincia. Esto no tranquiliza a los gremios. “Los judiciales estamos en la misma situación que el resto de los estatales, nos informaron ya hace 15 días que se iba a tomar esta medida, en la última reunión que tuvimos con uncionarios del gobierno de la provincia de Buenos Aires”, sostuvo Roberto Cristófano, dirigente de la Asociación Judicial Bonaerense (AJB). En diálogo con Gestión Sindical, remarcó que “estamos en una situación similar que todos los sectores, comprendemos el contexto que se vive, pero trataremos de buscar una alternativa para que aparezcan los recursos necesarios para no perder salarios. Es una situación compleja por la crisis general potenciada por el coronavirus”.

En sus declaraciones, la ministra Ruíz Malex se refirió a las paritarias nacionales, que también están por el momento suspendidas, pero con algunas negociaciones que se están agilizando. “No hay tanto conflicto en ese sentido, porque los sectores que quizás ahora están reclamando aumentos salariales son principalmente los que han podido seguir funcionando normalmente: servicios esenciales, alimentos, transporte”, remarcó la funcionaria.

En cuanto al Estado, los gremios vienen pidiendo que se discutan los salarios, ya que el convenio actual está vencido. Desde ATE remarcan que el problema de la pérdida salarial es una tendencia que se mantiene desde el 2015 a la fecha, con números muy preocupantes. En su último informe, la Junta Interna de ATE en el INDEC sostuvo que “lamentablemente, los números son impresionantes, una vez más”.

“Desde noviembre del 2015 tuvo una caída del 34,1 por ciento donde, por ejemplo, tomando como referencia el salario de ese período para una categoría D0 actualizado a julio 2020 debería ser de 48.436 pesos, y no los magros 31.932 pesos actuales”, destacó el trabajo, al que tuvo acceso Gestión Sindical.

Aún si, se agregó, “se sumarán los 4 mil pesos a cuenta de futuros aumentos que otorgó el PEN a una parte de los trabajadores, la brecha sigue siendo gigante”. En tanto, desde noviembre del 2019 a julio de este año, el retroceso de los ingresos llega al 20,1 por ciento.

“Frente a la emergencia de la pandemia, el gobierno decidió posponer la paritaria en la que debíamos discutir el aumento de nuestros salarios que vienen perdiendo contra la inflación desde hace años. Los trabajadores estatales hemos seguido trabajando desde el 20 de marzo, cuando inició el primer tramo de la cuarentena”, subrayó la Junta Interna de ATE-INDEC.

En el instituto, remarcaron, “mayoritariamente, lo hacemos desde nuestras casas. En muchas, no hay condiciones materiales para llevar adelante en forma normal el trabajo de oficina o de hacer encuestas. Pero seguimos produciendo estadísticas para el mejor conocimiento de la realidad y que con ellas se puedan elaborar diagnósticos y pensar soluciones para los problemas que se evidencian en la misma”. Por eso, desde ATE-INDEC “seguimos exigiendo la convocatoria a la mesa de negociación paritaria, la recomposición de nuestros salarios y el pase a planta sin pérdida salarial para todos los trabajadores del INDEC”.