Los gremios del PAMI negocian con Luana Volnovich un “aporte solidario” salarial del 2%

Los gremios del PAMI negocian con Luana Volnovich un “aporte solidario” salarial del 2%

Se trata de un descuento compulsivo a los haberes de los 13.000 trabajadores, estén o no afiliados a un sindicato; su monto duplicaría al que ya rige para todos los empleados estatales desde comienzos de año

Un nuevo foco de conflicto podría estar comenzando a gestarse en el PAMI, organismo que dirige la camporista Luana Volnovich. Los principales gremios que integran la paritaria del instituto previsional (UTI, UPCN y ATE) se encuentran negociando un “aporte solidario” salarial del 2%, un monto que duplicaría al que ya rige para todos los empleados estatales desde comienzos de año. Se trata, en realidad, de un descuento compulsivo a los haberes del conjunto de los trabajadores, estén o no afiliados a un sindicato.

Lo cierto es que, desde 2005, los empleados del PAMI ya aportan un 0,5% de su masa salarial total a los gremios paritarios. A ese porcentaje se le sumaría ahora el descuento obligatorio del 2% para los sueldos brutos de cada uno de los trabajadores, una disposición que, gracias a la buena sintonía con Volnovich, los sindicatos se ilusionan con concretar próximamente. Según lo estipulado, lo recaudado sería enviado a un fondo y luego repartido entre los gremios del sector para actividades de capacitación y acción social.

Consultado al respecto por LA NACION, el titular de la Unión de los Trabajadores del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (UTI), Osvaldo Barreñada, defendió el “aporte solidario” al considerar que se sustentaría principalmente en “una base de igualdad”. “Los afiliados a los gremios paritarios aportan y, de hecho, al conseguir aumento salarial, cobran menos que los que no están afiliados”, sostuvo el referente del gremio mayoritario del instituto. Y aclaró que, como el PAMI no es técnicamente estatal, sus empleados se rigen por un convenio distinto.

En ese sentido, Barreñada precisó que el “aporte” es una demanda que está presente “desde hace años”, pero que “hasta el día de hoy no se llegó a ningún acuerdo”. Sin embargo, fuentes internas del PAMI aseguraron a este diario que la resolución estaría “al caer”. El responsable de ponerle la firma es el funcionario Darío Ramos, principal interlocutor con los sindicatos e hijo de Mónica Risotto, directora Asociaciones Sindicales del Ministerio de Trabajo. Es ella quien, desde su rol en la cartera que conduce Claudio Moroni, garantizaría la homologación del acta una vez alcanzado el entendimiento.

En el PAMI conviven alrededor de 13.000 trabajadores y seis sindicatos. Con 5500 afiliados, aproximadamente, el mayoritario es UTI. En un segundo escalafón en la representación están los gremios estatales de UPCN y ATE, que tendrían entre 3000 y 2000 afiliados, respectivamente, según informaron a LA NACION fuentes del organismo. Además, están el Sindicato Único de Empleados del PAMI (Sutepa), de unos 1400 afiliados, y la Unión de Trabajadores del Estado (Utera), que tendría 1200. El de menor representación es el de los médicos profesionales, que no alcanzaría los 500 afiliados.

Por Pedro Lacour

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