Gustavo Menéndez y Mariel Fernández ya piensan en ampliar ventajas en las generales de noviembre

Gustavo Menéndez y Mariel Fernández ya piensan en ampliar ventajas en las generales de noviembre

En Merlo y Moreno vencieron a Juntos, pero estuvieron lejos de los números históricos del PJ en dos bastiones del Oeste.

En los municipios vecinos de Moreno y Merlo, los peronistas Mariel Fernández y Gustavo Menéndez, respectivamente, lograron victorias que no obstante tuvieron un sabor amargo.

En ambos casos, más allá de haber derrotado a las nóminas de concejales de Juntos, el total de votos del Frente de Todos estuvo por debajo de las expectativas y de los márgenes históricos de dos bastiones peronistas.

En el plano municipal de Moreno, la boleta que armó la intendenta sacó un 38,76% de los votos, con una ventaja de ocho puntos por sobre las listas que iban con Facundo Manes y Diego Santilli, que en conjunto reunieron un 30,26%.

En tercer lugar quedó el Frente de Izquierda, con un total de 7,83%, seguido de Avanza Libertad de José Luis Espert con 4,03%, y Vamos con Vos de Florencio Randazzo con 3,37%. Más abajo quedaron Encuentro Vecinal en Acción (2,32%), Unión Celeste y Blanco (2,02%) y Republicano Federal (1,50%).

En el caso de Merlo, el Frente de Todos obtuvo un 39,96%, superando a las listas de Juntos, que sumaron un 28,17%.

Siguió el Frente de Izquierda con 8,78%, que podría entrar al Concejo en un hecho histórico si en las Generales repite la buena performance realizada.

Siguen Vamos con Vos, con 5,45% y en el quinto puesto Avanza Libertad, con 5,10%. Unión Celeste y Blanco (2,26%), Vocación Social (1,66%) y Republicanos Federal (1,56%) también superaron el piso de 1,5% de los votos y están en condiciones de presentarse en noviembre.

el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez, en una recorrida por los colegios donde se votó en su distrito. Zonal Oeste

Con gusto a poco

Pero más allá de los números, en los dos gobiernos municipales la conclusión fue clara y la misma: la victoria no fue suficiente.

Por un lado, no bastó para equilibrar las derrotas en distritos de la Primera Sección electoral usualmente esquivo, como San Isidro y Vicente López; y mucho menos los batacazos de la oposición en lugares como Morón, Tigre y San Martín.

Además, esos 8 y 11 puntos de ventaja parecen exiguos si se los compara, por caso, con los resultados de la anterior legislativa, igualmente adversa para el peronismo. 

Esas Primarias, de medio término para el entonces presidente Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal, tampoco habían tenido resultados satisfactorios para el peronismo, entonces identificado bajo el nombre de Unidad Ciudadana.

Sin embargo, más allá del mal desempeño provincial, a nivel municipal en estos dos distritos se habían dado victorias mucho más amplias del peronismo, algo que además de preocupación ahora genera la obligación ineludible ampliar el margen dentro de dos meses.

Los números del retroceso

En las generales de ese año, el oficialismo de Moreno, entonces gobernado por el peronista Walter Festa (de muy bajo desempeño el domingo, con boleta corta) había obtenido un 43,56% de los votos, contra el 31,19% de Cambiemos.

En Merlo la victoria peronista fue aún más contundente, con un 49,67% contra el 28,09% del macrismo. Y eso ya estaba mal, si se comparaba con los números históricos. Podría haber sido un piso, si no fuera por lo de estas Primarias.

Hay algo más: por entonces, el massismo le restaba votos al peronismo local. Ahora, acoplado al Frente de Todos, esa fuga de votos no existe. Y sin embargo, los números fueron peores. En Moreno son casi cinco puntos porcentuales menos que en aquella ocasión y en Merlo, la caída es de alrededor de diez.

La intendenta Mariel Fernández votó en Cuartel V.

Por eso, las victorias locales no lograron evitar las caras de preocupación en los bunkers de Mariel Fernández y Gustavo Menéndez ante la derrota provincial. Desde allí, enseguida, comenzaron a replantearse estrategias de campaña para las generales del 14 de noviembre.

La oposición​

En paralelo, en la oposición de Juntos hubo también quienes festejaron más que otros, aunque claro, los números generales en territorio habitualmente adversos causaron satisfacción.

Mientras los oficialismos peronistas fueron con listas, a nivel municipal la alianza opositora dirimió internas en sus nóminas de concejales, alineadas con Diego Santilli o el neurólogo radical Facundo Manes.

En Merlo, la Juntos tuvo una competencia entre el presidente del interbloque Juntos por el Cambio, David Zencich, en la sábana de Santilli, que logró un 67,96% del total de los votos del frente, y una lista encabezada por Pablo Cocuzza, de Manes, que obtuvo el 32,03% restante.

En Moreno, en cambio, la línea de Santilli presentó dos listas que se dividieron los votos, lo que permitió que Julián Marco Cigna, el candidato de Manes y Joaquín De la Torre, caudillo del vecino San Miguel, saliera primero con el 39,72% de los votos que acumuló la alianza opositora.

Los alineados con el PRO se repartieron los sufragios al ex vicejefe de gobierno porteño y quedaron abajo, uno con el 35,53% de los votos de Juntos y el otro, con 24,74%.

Ex intendentes

Otra particularidad compartieron Moreno y Merlo, que fue las fallidas reapariciones de los ex intendentes Walter Festa y Raúl Othacehé, enemistados con sus sucesores, más allá que sean del mismo signo político. 

En Moreno, el ex alcalde derrotado en las PASO de 2019, desafió ahora a la intendenta Mariel Fernández con una boleta corta bajo el sello Encuentro Vecinal en Acción. Así, logró esquivar las restricciones para competir por dentro del Frente de Todos. Pero no le fue nada bien: sin candidatos a diputado nacional ni a la legislatura bonaerense, la lista de concejales que encabezó su pareja, la diputada nacional Romina Uhrig, cosechó apenas algo más del 2% de los votos. Al menos, le alcanzará para estar en noviembre.

Raúl Othacehé quedó fuera de las internas del Frente de Todos. Zonal Oeste Merlo

El ex intendente de Merlo e histórico barón del conurbano, en tanto, quería competirle a la lista de Menéndez en una interna del Frente de Todos, con una nómina que él mismo iba a encabezar. La Junta electoral del PJ, primero, y la Justicia después, desestimaron su lista por cuestiones formales, pero de algún modo estuvo: promediando la elección del domingo, el "Vasco" denunció en las redes que en algunas mesas de votación habían aparecido "boletas truchas" con su candidatura.

Finalmente, la lista de Othacehé quedó afuera de las PASO por decisión de la Junta Electoral bonaerense, luego avalada por la Justicia, pese a las denuncias de "El Vasco", quien lo adjudicó a una "operación" de Menéndez y lo definió como un "fraude" y "una tremenda injusticia".

Comentá la nota