“Fue una mala experiencia por una parte, y una grata por otra, porque era el cumpleaños de mi viejo. No quisimos dejarlo desapercibido. No hemos sido tantas las personas, ni hemos tenido la ruptura de ningún protocolo”, dijo Javier Recabarren.

“Nos hemos sentado con distanciamiento de las mesas, porque el local tiene las habilitaciones para funcionar y trabajar. Fue exceso de horario sin darnos cuenta”, explicó.

Por otro lado, contó como fue el procedimiento policial: “el operativo fue extraordinario. Llegó de repente con muchísima gente. Terminaron siendo más los oficiales de Policía que los que estábamos ahí”.

Destacó que: “lo bueno y positivo es que estamos todos bien de salud, no hay ningún caso (de Covid-19). En cuanto a la salud no hay inconvenientes. Nos haremos los test rápidos, hisopados lo que sea necesario”.

Al finalizar, Recabarren sostuvo que: “No fue nada grave, ni trascendental, ni escandaloso como dicen los títulos de los diario que siempre agregan, se ensañan y el amarillismo está a la orden día”.