Además señaló que la provincia de Jujuy no cuenta con una ley contra la violencia laboral y, según indicó, este tipo de violencia “existe en todos los ámbitos públicos y privados, cada vez en mayor ascenso”.

Al referirse a este tipo de violencia ejercida en los lugares de trabajo, Clara Langhe de Falcone manifestó que “esto es una temática que la trabajo hace más 15 años, desde antes de ser Diputada y lo triste es que en Jujuy no se ha elaborado ninguna ley pese a la cantidad de proyectos que habíamos presentado y a pesar que habíamos hecho el 1º Congreso Legislativo sobre violencia laboral en el 2009”.

Indicó “me gusta que la gente joven se preocupe porque la violencia laboral existe en todos los ámbitos públicos y privados, cada vez en mayor ascenso, más la violencia laboral que es el acosos psicológico que se ejerce a través del poder que puede tener el sector público y privado”.

“Jujuy no tiene ley provincial y a nivel nacional tampoco hay, pero puedo decir que si son muchísimas las provincias argentinas que se han preocupado por esto, por eso aconsejaba a esta Comisión de Genero del CAPSAP que llegue a la Legislatura y exija a nuestros legisladores que se preocupen y dicten una ley contra la violencia laboral”, aseveró la Jueza.

Además expresó que la violencia en el ámbito laboral “produce en el trabajador o trabajadora una enfermedad psicológica que hasta lo lleva a renunciar al trabajo con las consecuencias propias que eso significa”.

“Esto es una cuestión que la Organización Mundial de la Salud ha demostrado que se está dando en todo el mundo y que hay que empezar a pensar en las consecuencias dañosas que produce y las estrategias o políticas de estado que hay que empezar a elaborar para frenar este flagelo que se está dando mundialmente”, sostuvo.

Sobre los lugares donde una mujer o un hombre podrían denunciar este tipo de hechos, la Jueza del Superior Tribunal de Justicia de Jujuy señaló “desgraciadamente no tenemos un organismo especifico y es difícil probar la violencia laboral, la que también a veces se da entre iguales, quiero decir con esto que a veces los propios compañeros violentan ha pedido de su jefe a sus compañeras de trabajo para sacar, por ejemplo, un ascenso en su trabajo, pero la mujer por lo menos debería ir al Ministerio de Trabajo porque no se puede hablar de un delito penal porque no hay pruebas para decir esto”. Mencionó que “debe ir a organismos específicos, acá está UPCN donde hay un sector que trabaja mucho a favor de la mujer dentro de su ámbito de trabajo y tiene una serie de políticas para proteger a la mujer y evitar el acoso sexual y todo lo demás”.

También apuntó que “se debe difundir, lo que pasa acá es que no hay difusión y hay que difundir mucho o ir a un diario, por ejemplo, para que se haga público porque los medios de comunicación son muy importantes en la medida de que traten el tema con seriedad y que la fuente de información sea seria y se ratifique, por ejemplo, la mujer con nombre y apellido y numero de documento y diga lo que le está pasando, por eso le doy mucha importancia a los medios de comunicación”.

Para finalizar, en relación a la situación de violencia laboral, JUJUY LA DÍA® consultó a la Jueza del STJ de Jujuy, si observa que el Estado provincial ejerce este tipo de violencia laboral a sus trabajadores. Al respecto Clara Langhe de Falcone manifestó “quisiera excepcionar no totalmente al Estado, pero lo que si veo, ustedes saben porque hay que sacarse la careta en todo, que hay algunas organizaciones sociales que son muy violentas con sus, no sé si decirles afiliados o adherentes, no sé cómo llamarlos, ya que ejercen mucho la violencia de género, la violencia laboral digamos, porque si no vas a la manifestación o no haces lo que te digo te quito la casa o el dinero que te damos por mes. Ustedes lo saben perfectamente, no vengo a dar nombres pero digo lo que sucede”.

Aseguró que “eso es malo porque no hay derecho, porque la sociedad mundial ha estado trabajando en la preservación de los derechos que todos tenemos, que es la dignidad y la integración psicofísica de cada uno de nosotros, y uno tiene que tener libertad de decidir cómo es su vida y no que se la impongan y que lo manejen como un títere, ya que todo eso va en la perspectiva de la violencia laboral y violencia de género. Más que en el Estado lo veo en las organizaciones sociales y punto, no quiero extralimitarme en ese sentido”, concluyó.