Laboratorios nacionales responden a controlador de Cruz Verde: “Las farmacias deben ser farmacias y dejar de elaborar productos y manejar marcas propias”

Laboratorios nacionales responden a controlador de Cruz Verde: “Las farmacias deben ser farmacias y dejar de elaborar productos y manejar marcas propias”

“Si quieren hablar de transparencia, hablemos de todo. Cuando dice que los laboratorios se llevan el 60%, la gente piensa que se llevan el 60% de la ganancia, pero es el 60% del valor. Y quién es el que investiga, el que desarrolla, el que hace todo el trabajo…entonces cómo no va a ser el 60%. Si no sería una donación", afirma. Además, dice que son los laboratorios de innovación los que producen los medicamentos que pueden ser hasta cuatro veces más caros que en Europa.

Femsa pateó el avispero hace algunos días cuando reveló sus números con el objetivo de proponer medidas para que bajen los precios de medicamentos. En dicha oportunidad, dijo que los laboratorios son los que se llevan gran parte del precio final de los remedios, especialmente en el caso de los de marcas originales, que son los únicos que en Chile son los más altos de América Latina. Genéricos y similares están en el promedio o más bajo. Propuso, entonces, que los laboratorios vendan a las farmacias al mismo precio que al Estado, con lo que caerían los precios un 40%.

Esto generó ruido en la industria. Uno de los actores que quiso responder a este emplazamiento es la Asociación Industrial de Laboratorios Farmacéuticos (Asilfa). “Somos los laboratorios que fabricamos los medicamentos genéricos, los más baratos de América Latina, de mucha tradición”, parte la entrevista Elmer Torres, vicepresidente ejecutivo del gremio.

No pierde tiempo y apunta sus dardos a las cadenas de farmacias. “De alguna manera estas cadenas han cambiado la comercialización de los medicamentos. Los precios se han incrementado con este abuso de posición dominante. Y todos estos artículos que se han agregado al proyecto (Ley de Fármacos II) en lugar de restringirlos los incentivan aún más”.

Y luego se enfoca directamente en el controlador de Cruz Verde: “Si quieren hablar de transparencia, hablemos de todo. Cuando dice que los laboratorios se llevan el 60%, la gente piensa que se llevan el 60% de la ganancia, pero es el 60% del valor. Y quién es el que investiga, el que desarrolla, el que hace todo el trabajo…entonces cómo no va a ser el 60%. Si no sería una donación. Además, en ninguna parte dice que ellos son dueños de un laboratorio y distribuidora, por lo tanto, su margen es más grande de lo que dicen”.

¿Pero enfocarse en la discusión de la integración solo sería para Cruz Verde, que es la única que aún mantiene laboratorio?

No, porque las otras cadenas no tienen laboratorio propio, pero tienen registros sanitarios y mandan a producir en el exterior. Las farmacias deben ser farmacias, comercializar productos y dejar de producirlos y manejar marcas propias.

¿Dice que hay una integración vertical de Farmacias Ahumadas y Salcobrand pese a no tener laboratorios, dado que mandan a fabricar sus propios medicamentos?

Claro. Las cadenas tienen la propiedad de registros sanitarios. Para producir un medicamento debo ser dueño de uno. Para disimular esas dos cadenas vendieron sus laboratorios, pero se quedaron con el negocio igual, porque sus registros sanitarios los mandan a fabricar a India, a China o acá en Chile y pueden comercializar sus marcas propias. Por ello decimos que las farmacias no pueden estar ligadas a producción ni de terceros ni marcas propias ni dueños de registros sanitarios, como los laboratorios tampoco pueden tener locales. Tampoco deberían tener distribuidoras, como Socofar lo hace con Cruz Verde.

¿Los márgenes del negocio (casi 60% para laboratorios) que expone Femsa son correctos?

Son datos que ellos entregan y que no podemos cuestionar, porque ellos compran por Socofar que es de ellos. No son los costos que los laboratorios le entregan.

Femsa planteaba como gran conclusión que son los laboratorios internacionales o que generan los medicamentos de marca originales los que los discriminan vendiendo más caros a ellos que en otros países y que al Estado chileno. Si vendieran igual bajaría 40% los precios, dicen…

En Chile un producto de los laboratorios de patentes o internacionales puede valer cuatro veces más que en Europa. Pero eso debe explicarlo la Cámara de Innovación Farmacéutica (CIF) que es el gremio que los agrupa. Nosotros lo que hemos dicho, en línea con la propuesta del Ejecutivo, es que se debe regular aquellos productos internacionales que son más caros con un observatorio de precios. Así tendrán que dar una explicación de por qué es más caro, que sea un control. Cuando se habla de que en Chile los medicamentos son los más caros de la región, es sólo en ese nicho de marcas originales, que en unidades es el 18% de lo que se comercializa en todas las farmacias del país. El resto se refiere a los genéricos que son los más económicos de América Latina. La gente tiene los problemas en los de patente, los innovadores.

Y dado que Femsa dice que los laboratorios están marginando más, ¿hay algo que se pueda hacer ahí?

Con la ley de fármacos II creo que bajarán los precios de los medicamentos más caros, dado al observatorio de los precios de medicamentos.

Lo segundo es que a dos años desde la ley que permitió al Cenabast participar en las licitaciones de compras (periodo que se cumple en diciembre), las cadenas podrán comprar directamente a ellos. A corto plazo podrán hacerlo y acceder.

¿Por qué ocurre que los laboratorios de marca o de patentes venden más caro en Chile?

La economía del país lo permite, libre competencia…porque además el Estado no ha querido intervenir en este segmento. Hay experiencias en que países que son libre competencia tienen un observatorio que, de alguna manera, controla.

Por otro lado, es importante decir que el Estado no tiene cobertura sobre los medicamentos, al final de cuentas la gente termina pagando de su propio bolsillo los medicamentos, porque no tienen cobertura. A pesar de que muchos de estos deberían ser entregados de forma gratuita en los consultorios, a veces no se encuentran. Por esa razón creemos que hace falta una política de salud importante de crear cobertura de los medicamentos en el sistema público y privado.

¿Pero eso no termina con los altos valores?

El país debería tener una mayor cobertura de medicamentos, genéricos o de marca, porque es un bien esencial y que es parte de la salud. En toda esta discusión que hay en garantizar la salud, se debería tener como un punto básico generar una mayor cobertura, no solo para las patologías GES o de Ricarte Soto, que también tienen cobertura, pero que son para patologías muy complejas y un número pequeño de enfermedades. La gran cantidad de enfermedades crónicas no tienen cobertura.

¿De todos los medicamentos, incluyendo los que son los más caros de la región?

De todos los remedios. Quizás en proporciones distintas, pero que haya seguros.

Pensando en el costo para el Estado, ¿no es mejor dar cobertura a genéricos o bioequivalentes?

No todos los medicamentos tienen bioequivalencia. Me dices que podríamos reemplazar los de marca por los bioequivalentes que son más económicos…pero no todos los medicamentos tienen bioequivalencia. Sobre todo cuando hablamos de medicamentos de patentes, la mayoría no tienen equivalente, dado que las patentes pueden durar hasta 20 años. Por lo que no existen alternativas en el mercado. A ese tipo de medicamentos también debería pasar por el observatorio de precios y una cobertura por parte del Estado.

¿Que los médicos receten por denominación común internacional (DCI), como está en el proyecto, puede ayudar a quitar algo de presión a los medicamentos más caros, dado que según Femsa es parte fundamental para explicar los altos precios?

Si bien hay un grupo de médicos que piensa que esa es una solución, me parece que hay que ser honesto y transparente. Lo primero que debemos hacer para crear una política pública que permita mejorar la calidad de vida a la gente es tener presente algunos aspectos técnicos de lo que significa en Chile la bioequivalencia y la intercambiabilidad (de medicamentos). Lo primero es que la bioequivalencia no garantiza la calidad, lo que hace es demostrar que un medicamento A es equivalente al B en concentración y que se absorbe en igual lapso. Pero no garantiza la calidad de largo plazo. En Chile hace poco el director del ISP hizo un informe y dice que solamente el 30% de todos los medicamentos cumple con las buenas prácticas de manufacturas. Hay un 15% que no cumple e incluso han tenido que cerrarse. En esa condición, sumado a que solo 2.890 productos tienen la bioequivalencia de un universo de 8.000, consideramos que no es lógico obligar a prescribir a un médico exclusivamente genéricos o bioequivalentes, porque no se pueden comparar los estándares. Es una razón técnica.

¿Por qué no se avanza más en bioequivalencia?

Ha ido avanzando, pero son procesos largos y muy costosos. En Latinoamérica son solo tres países los que han ingresado a bioequivalencia: Brasil, México y Chile. El resto no, porque el costo son US$100 mil para cada producto. Entonces son criterios distintos.

No hay un estándar de calidad garantizado como para obligar hacer intercambiabilidad, considerando que gran parte de los medicamentos se importan del exterior, de India, China…y en esos países no tienen la fiscalización de Europa y Estados Unidos.

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