La Oficina Anticorrupción amplió denuncia contra Macri por lavado, evasión y falsear su DDJJ

La Oficina Anticorrupción amplió denuncia contra Macri por lavado, evasión y falsear su DDJJ

Es en la causa por los 54 millones de pesos que Macri recibió y no declaró mientras era presidente. También aparecen maniobras que indican lavado de dinero en operaciones inmobiliarias cuando era Jefe de Gobierno.

“En Argentina para ganar plata hay que evadir impuestos”. La frase la pronunció esta semana Mauricio Macri. Parece que hablaba de sí mismo, ya que la Oficina Anticorrupción (OA) amplió la denuncia por los 54 millones de pesos que cobró y no declaró y formaban parte de su falso fideicomiso ciego y pidió que sea citado a indagatoria.

El organismo que comanda Félix Crous encontró más falseamientos maliciosos en sus declaraciones juradas, maniobras que indican lavado de dinero y evasión que fueron remitidas a la Unidad de Información Financiera (UIF) y a la AFIP e incluso una operatoria inmobiliaria con visos de lavado de dinero que involucra a Macri cuando era jefe de Gobierno porteño.

La denuncia penal contra Macri por los 54 millones de pesos la radicó hace unas semanas la OA en base a documentación que le envió Ricardo Nissen, titular de la Inspección General de Justicia (IGJ). Tal como informó El Destape, la IGJ solicitó que se lo declare nulo el fideicomiso ciego donde el ex presidente puso parte de su patrimonio por numerosas irregularidades y detectó transferencias ilegales por más de 54 millones de pesos a Macri durante su gobierno de una sociedad donde tenía acciones Juliana Awada, su esposa. Entre otras cosas la OA plantea ahora que detrás de esa sociedad está el propio Macri. El caso está en manos de la jueza Maria Romilda Servini.

La ampliación que realizó la OA tiene varios puntos:

Que las acciones preferidas de Agro G (incluidas en el falso fideicomiso ciego) por las cuales Macri cobró 54 millones de pesos de dividendos que no declaró estaban en su poder desde el 2013 y no desde 2016.

Que Macri consignó que tenía el 14,7% de Agro G pero en realidad su participación era del 44,16%

Que Latin Bio, la sociedad donde su esposa Awada y su aparente testaferro Alejandro Peña Braun y que es la que hizo las transferencias por 54 millones de pesos, es en realidad del propio Macri

Que resulta sospechoso que Macri rescindiera el contrato de su fideicomiso ciego el 11 de diciembre de 2019, el día después de dejar la presidencia, cuando tenía vigencia por varios meses más.

Que siendo jefe de Gobierno porteño Macri le dio beneficios impositivos a un edificio donde adquirió varios departamentos a un precio menor a su valor, lo cuál puede encubrir otra acción de lavado de dinero.

Que todos estos datos “robustecen la hipótesis de la consumación de los delitos de lavado de activos y de evasión tributaria” y por eso se remitió la información a la UIF y la AFIP

Latin Bio

Siendo presidente Macri recibió cuatro transferencias por un total de de 54 millones de pesos por parte de Agro G, una de las empresas en las que tiene acciones y que incluyó en su falso fideicomiso ciego. La mecánica fue la siguiente. Desde octubre de 2008 Macri tenía el 20% de la empresa Agro G. Otro 40% lo tenía Ventilux SA, radicada en Uruguay, y el 40% restante José Alberto Andrés Uriburu. Macri le transfirió sus acciones al Fideicomiso Ciego el 11 de julio de 2016. La OA detectó, sin embargo, que Macri llegó a tener el 44,16% de Agro G pero no lo consignó en sus declaraciones juradas.

Datos que encontró la IGJ y sobre los cuales investigó la OA: Agro G nunca repartió dividendos ni pagó honorarios a sus directores ni confeccionó la memoria de sus estados contables anuales. Sin embargo hizo transferencias de dividendos por 54 millones de pesos a Macri. ¿Como? A través de acciones preferidas que fueron creadas en 2013. La IGJ afirmó que “la emisión de las referidas acciones preferidas -detalla la IGJ- constituyeron al instrumento para la fuga de grandes sumas de dinero de la sociedad Agro G en exclusivo beneficio del ‘Contrato de Fideicomiso Ciego de Administración’”, o sea, de Macri.

Los fondos provenían de la empresa Latin Bio. En el directorio de Latin Bio figuraba como presidente Alejandro Jaime Braun Peña hasta el 1 de octubre de 2020, cuando lo reemplazó Pablo Clusellas, secretario Legal y Técnico de Macri. Y, según la IGJ, Juliana Awada tiene el 20,25% de la firma. Agro G, de la que Macri es accionista, tiene a su vez el 29.75% de Latin Bio. Si se suman Agro G y Awada da el 50%. Y si se tiene en cuenta que Peña Braun es sindicado como testaferro de Macri y que Clusellas es una de sus personas de confianza, todo indica que en realidad es Macri el que tiene el control de la empresa que le giró a él mismo el dinero.

Todo esto fue analizado por la OA que, en la ampliación de la denuncia contra Macri, afirmó que “queda robustecida la hipótesis (...) relativa a que el único hombre detrás de Latin Bio S.A. sería Mauricio Macri, de modo que la remisión de los $54.286.824, podría resultar un autogiro de dinero que intentara otorgarle apariencia de licitud a una suma de origen espurio”.

Para analizar este caso el escrito presentado por la OA cita la investigación de El Destape respecto de Flortal SA, una sociedad que se convirtió en un engranaje fundamental para entender los mecanismos de vaciamiento de Correo Argentino y de fuga y lavado de dinero por parte de la familia Macri. Esa firma radicada en Uruguay figura como accionista de otra empresa que los Macri utilizaron para vaciar Correo Argentino y luego como la que le envió 1,2 millones de dólares a Gianfranco Macri. El mecanismo con Latin Bio parece ser similar, solo que en este caso le envió el dinero directo a Mauricio.

La OA también detectó que Macri mintió en su declaración jurada respecto al porcentaje de acciones que tenía de Agro G. “Puede concluirse que la tenencia accionaria en Agro G S.A. declarada por Mauricio Macri en su Declaración Jurada Patrimonial Integral de Carácter Público del año 2015, no ascendía al 14,70% del capital social, sino que su participación triplicaba dicha cantidad en tanto representaba el 44,16%”. Lo mismo pasa con la declaración jurada de 2014. En base a esto ampliaron la denuncia contra Macri por “falseamiento malicioso” de su declaración jurada.

Un párrafo de la ampliación presentada por la OA resume todo: “Así las cosas, entiendo que el pago en efectivo al Fideicomiso Ciego de Administración de los de $10.160.400 por parte de Agro G S.A. como cancelación de los dividendos de Latin Bio S.A., la transferencia de los $54.286.824 con las particularidades descriptas y sin que existan constancias de pago del impuesto a los créditos y los débitos, la inversión de prácticamente la totalidad de dicha cantidad en títulos públicos por parte del Fideicomiso Ciego de Administración que terminaron depositados en la cuenta comitente de Mauricio Macri, y la tolerancia de este último de una inmutable deuda millonaria durante al menos 6 años con la firma Agro G S.A., en períodos de altísima inflación en los que dicha firma acumulaba ganancias en sus cuentas de reserva, robustecen la hipótesis de la consumación de los delitos de lavado de activos y de evasión tributaria”

Avaro

Otro dato interesante que suma el organismo que dirige Crous es que Macri no aguantó ni 24 horas luego de dejar la presidencia para recuperar los bienes que dejó en el falso fideicomiso ciego.

“Ha podido acreditarse que el 11/12/19, es decir un día después de que Mauricio Macri dejara la Presidencia de la Nación, Gabriel Hernán Costas, su apoderado, y Esteban Enrique Ángel Urresti, vicepresidente en ejercicio de la presidencia de Seguridad Fiduciaria S.A., rescindieron anticipadamente el contrato de Fideicomiso Ciego de Administración”, dice el escrito presentado ante la jueza Servini. Y sigue: “En consecuencia, más de 6 meses antes de lo previsto originariamente en el contrato que diera origen al Fideicomiso Ciego de Administración, Mauricio Macri, recuperó los activos cuya administración le había cedido”.

Caminito

Macri también incluyó en su falso fideicomiso ciego su participación en otro fideicomiso desde el que administraba unos departamentos en el barrio de Barracas. El 19 de julio de 2013 Macri pagó casi 900 dólares el metro cuadrado en el Edificio Molina Ciudad pero, según la OA, ese valor trepó luego a 3.000 dólares, un 333% más.

“En función de lo expuesto, no podría descartarse que la exorbitante diferencia de valores entre el precio de adquisición del m2 y su valor actual que favoreció a Mauricio Macri, en realidad encubriera el aporte de una suma de dinero espuria abonada como contraprestación de las exenciones impositivas concedidas, que el propio Macri impulsó desde la jefatura de gobierno en favor de los desarrolladores del Edificio Molina Ciudad, y que él mismo reglamentó pocos días antes de adherir al Fideicomiso Caminito que lo construyó”, dice el escrito presentado por la OA.

Se refiere a que Macri creó un “Distrito de las Artes” dentro de “un determinado polígono del barrio de Barracas,eximiendo de impuestos a los inmuebles que quedaban incluidos en él” y que el edificio donde Macri invirtió quedó incluido en ese régimen de beneficios.

El organismo anticorrupción cita un documento de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que dice que “durante largo tiempo el sector inmobiliario ha sido la opción preferida de los delincuentes para ocultar los fondos ilícitos, y la manipulación de los precios de los inmuebles es un método habitual para trasladar ilegalmente el producto del delito entre las partes de una operación. Se han detectado las siguientes técnicas. Compra: al comprar un inmueble el delincuente intentará lavar fondos(de origen delictivo) pagando una parte del precio de compra en efectivo o en otros valores 'bajo cuerda', y en los documentos formales de la venta se consignará el resto del precio total de compra”

Para la OA “la participación de Mauricio Macri en el Fideicomiso Caminito podría encubrir una operación de lavado de activos de origen ilícito” y le envió todo a la UIF para que intervenga.

 

POR ARI LIJALAD

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