Pablo Dragún, director del Centro de Estudios Económicos de la UIA (CEU), sostuvo que si la segunda ola de la pandemia obliga al cierre de actividades en los países vecinos, como el caso de Chile, podría afectar a las exportaciones argentinas. También hay preocupación por Brasil. A continuación, la charla que Dragún mantuvo con Ámbito:

Pablo Dragún: No tenemos medido el tema, pero lo que sí podemos saber por lo que pasó el año pasado, que si cae la demanda de los países vecinos por cierre de actividades y hay más recesión, impacta directo sobre los flujos de comercio por menor demanda.

P.: ¿El 2020 hubo caída de los flujos de comercio exterior?

P.D.: El año pasado no se observó a nivel global detenciones de flujos de comercio, por causa directa la pandemia. Es decir. no hubo menos tráfico causado directamente por el covid, sino que la baja ocurrió por por caída de la actividad económica.

P.: ¿Puede ser un ejemplo Chile, que es uno de los pocos países con los cuales Argentina tiene superávit y que ahora entra en fase 1 en el 70% de sus actividades?

P.D.: Eso puede pasar. Allá cayó el PBI 5,8% en 2020, con un peso muy fuerte en segundo y tercer trimestre, con el 14,2% y 9% respectivamente y cayeron más fuerte las importaciones que las exportaciones

P.: ¿Podría repetirse ese escenario en 2021 en Chile?

P.D.: Si vivimos un segundo y tercer trimestre como el año pasado, esperemos que no, tendríamos una variación cero por baja base de comparación, pero repercutiría de forma directa en una no suba de importaciones. No obstante, no creo que se llegue a ese nivel por tanto tiempo igual por el desarrollo de las vacunaciones, pero eso ya excede mis conocimientos profesionales.

P.: ¿Puede Brasil tener esta año una merma de la recuperación económica por motivo de la pandemia?

P.D.: Brasil fue uno de los países de la región que menos cayó el año pasado, pero su situación epidemiológica está tremenda. Encima San Pablo, que es la principal área de la economía brasileña, tiene mayor cantidad de casos. Brasil tuvo una baja fuerte en el segundo trimestre del 10,9%, pero fue de -3,9% en el tercero. El cierre del 2020 no fue tan fuerte. Como el cierre no fue tan fuerte, hay que ver qué sucede. La situación sanitaria es riesgosa para el comercio.

P.: ¿Podría quedar afectada la recuperación de Brasil?

P.D.: Por ahora no tenemos datos estadísticos ni de las empresas que nos indiquen que hubo un cierre pero, como decimos siempre, las importaciones de un país dependen del nivel de producto. Uno de los factores que más pesa es cuánto se mueve el nivel de actividad. Cuando más se mueve el consumo, más presiona sobre el sector importador.