El intendente de Paraná, Adán Bahl, anunció esta mañana el envió al Concejo Deliberante del proyecto que declara la emergencia hídrica en la ciudad, con el propósito de priorizar el uso razonable del agua y así garantizar el suministro en los barrios, el cual está en riesgo por la bajante histórica del río Paraná.

“El río Parana está atravesando una de sus peores bajantes y eso puede afectar el suministro de agua en la ciudad. Si el río sigue descendiendo, la bomba que alimenta la planta potabilizadora de avenida Ramírez tendría dificultades para funcionar”, alertó Bahl al inicio de la conferencia.

“Por eso, decidimos elevar un proyecto de ordenanza declarando la emergencia hídrica en Paraná. Necesitamos con urgencia priorizar el uso razonable del agua. De modo contrario, en este contexto y durante el verano, no vamos a poder garantizar el suministro en todos los barrios”, agregó el intendente.

Según indicó, la ordenanza es una medida "previsora", que se toma ante una situación crítica para "cuidar" a los vecinos y vecinas de Paraná. "Es otra de las acciones que venimos ejecutando ante la bajante para anticiparnos a los inconvenientes que pueda causar”, dijo.

Días pasados, el intendente Bahl elevó una nota al jefe de Gabinete de la Nación, Santiago Cafiero, para que interceda ante Cancillería para que se tomen medidas paliativas de la situación provocada por la prolongada bajante. El pedido fue que se dispongan las medidas ya concretadas meses atrás entre Argentina, Paraguay y Brasil, con la liberación de flujos desde la represa de Itaipú.

“Estamos ante una emergencia, es cierto. Pero, los problemas no se superan con miedo, sino con acciones, responsabilidad y organización. Tenemos un plan de trabajo para hacerle frente a esta contingencia”, aseguró el presidente municipal.

Por otro lado, se refirió a obras realizadas durante su gestión para anticiparse a los problemas que cada verano afectan el suministro de agua en Paraná. Mencionó el cambio de cañería obsoleta y la construcción de pozos semisurgentes, lo cual –dijo– va a permitir afrontar mejor esta crisis.

Además indicó que la Municipalidad gestiona obras para que "estos problemas queden atrás", como la duplicación de la planta de Echeverría, un nuevo acueducto de distribución y nuevas bombas a mayor profundidad para la planta de avenida Ramírez. "Pero son medidas a largo plazo y a la crisis hídrica la tenemos ya”, admitió.

“La clave para atravesar esto es la responsabilidad. Todas y todos necesitamos hacer un uso responsable y consciente del agua. Esto significa una única cosa: no derrochar el recurso y cumplir con lo que estipula la reglamentación”, remarcó.