Posadas. Desde la conducción nacional de la Confederación General del Trabajo (CGT), se demandará a los empresarios y al gobierno que se garanticen las fuentes de trabajo.

Al mismo tiempo se pedirá en el marco de las paritarias que se impidan los congelamientos en los salarios de los trabajadores, ya que durante el 2008 los ingresos sufrieron un notable retroceso.

El titular del grupo sindical, Hugo Moyano, destacó a un medio nacional que “el congelamiento salarial propuesto por el Gobierno de la Nación como salida para evitar los 1.200 despidos en la auto-partista Paraná Metal no pasó desapercibido para nosotros y lo criticamos como forma de solucionar el problema”.

Una mezcla de malestar y preocupación se instaló entre la dirigencia de la central sindical que conduce el camionero, que teme que la solución planteada para la metalúrgica en crisis se generalice a otros sectores y termine perjudicando la estrategia gremial de cara a las próximas paritarias.

Mesa chica

Con esa inquietud de fondo, Moyano reunirá la semana entrante a los miembros de la mesa chica cegetista a nivel nacional.

Su intención es promover allí un pronunciamiento contundente de la central en contra de cualquier posibilidad de que los salarios se conviertan en la variable de ajuste ante las complicaciones económicas.

“Los gremios no vamos a resignar la estabilidad laboral ni el poder adquisitivo de los salarios. Lo dijimos antes y lo vamos a sostener ahora”, advirtió uno de los miembros de la cúpula de la entidad en declaraciones radiales.

Inicialmente la mesa chica de la central iba a reunirse ayer, pero Moyano corrió el encuentro para la próxima semana, con el objetivo de asegurar una mayor presencia de dirigentes para cerrar filas con un discurso uniforme tanto en la estrategia salarial como en la postura en materia de despidos (ver aparte).

Al respecto, voceros cercanos al camionero adelantaron a un matutino porteño que la idea es que el documento de la entidad haga un llamado a la “responsabilidad” del sector empresario para que “sostengan los puestos de trabajo y el salario”, en línea con el reclamo que formuló la semana pasada la Presidente, Cristina Kirchner.

Negociación

Mientras que en Misiones, el secretario general de la CGT en la tierra colorada, José Milcíades Giménez, destacó que “los trabajadores no vamos a pagar los costos del ajuste que se va a provocar como consecuencia de la actual crisis mundial”.

Agregó que la “negociación con los empresarios no va a ser una tarea fácil. Nosotros esperamos que el gobierno, tanto provincial como nacional, medien en el asunto para que se respeten nuestros derechos ya adquiridos”.

Aunque el representante gremial se ocupó de poner paños fríos a la hora de referirse a los reclamos salariales. “Por supuesto que vamos a ser muy prudentes con los pedidos que vamos a concretar. Siempre teniendo en consideración los vaivenes económicos mundiales y cuáles son las características propias de cada sector productivo”, expresó el también representante del Sindicato de Conductores Navales de la República Argentina, seccional Misiones (Siconara).

Aunque poseen un norte en el mediano y largo plazo de carácter irrenunciable: “no vamos a desistir de un salario mínimo que permita a los trabajadores conseguir dar alimentos, salud y educación para su grupo familiar. Tenemos que recuperar el poder adquisitivo de los ingresos de los trabajadores”, sentenció el referente gremial misionero. Otra cuestión conflictiva se refiere a los posibles caminos a tomar por las empresas para “disminuir costos laborales”, tales como “disminución de las horas laborables, sobre-carga de trabajo, vacaciones adelantadas o despidos masivos, a todos los vamos a combatir con las herramientas legales que tenemos”, finalizó Giménez.