“Nos preocupa que sigan cayendo policías a raíz de la ola de inseguridad. Matar a un efectivo parece algo cotidiano”, aseguró a NOVA el secretario general del Sindicato Policial Buenos Aires (SIPOBA), Nicolás Masi, quien se mostró conmovido por el crimen de Sergio Fernández y Betiana Bringas, quienes el pasado martes por la noche sufrieron un robo en la puerta de su casa, quisieron defenderse pero no lograron sobrevivir al tiroteo que mantuvieron con al menos tres asaltantes.

Horas después, por el ataque quedó detenido un joven de 19 años, que además tenía pedido de captura por haber matado a otro policía a principios de agosto.

Masi señaló que la fuerza policial también se vio afectada por el caso de María Belén González, la mujer policía que fue atropellada tres veces por delincuentes que le robaron su arma. El hecho ocurrió en Almirante Brown y, tras ser operada, la víctima evolucionó favorablemente.

Asimismo, los efectivos reclamaron por la detención de ocho uniformados tras la muerte deJuan Martín Yalet, de 35 años, aprehendido durante una entradera en La Plata. Yalet entró en el patrullero RI 21.051 con las manos esposadas a la espalda y falleció de un tiro en la cabeza.

“Se acusa injustamente a ocho colegas de un lamentable hecho, mientras los jefes que se encontraban en el lugar se pasean sin asumir responsabilidades, siendo que ellos se encontraban a cargo del operativo. Puede haber uno o dos imputados pero no ocho”, señaló Masi.

En tanto, informó que los abogados del Sindicato se pondrán a disposición de los detenidos y agregó: “Nos llama la atención que no se preservara el móvil y que la fiscal Bettina Lacki los haya detenido a todos ellos sin haber estado en el lugar de los hechos”, detalló Masi.

Po último, el representante del gremio aseguró que desde que Daniel Scioli es gobernador vienen reclamando mejoras en las condiciones laborales. “Embarcado en la carrera presidencial, no nos va a recibir ni a reconocer nuestro derecho sindical avalado por la Constitución. Esperemos que con el próximo Gobierno podamos tener una mesa de negociación”, finalizó.

Por su parte, Silvia Barboza, tía de Ricardo Torres Barboza, efectivo asesinado en la planta transmisora del Ministerio de Seguridad Bonaerense, el 19 de octubre de 2007, aseguró a este medio que las familias de los policías “viven con miedo” porque “salen de sus casas para trabajar pero no sabemos si van a volver”.

Por los asesinatos de Torres Barboza, Alejandro Vatalaro y Pedro Díaz un ex policía bonaerense y el hijo de un ex agente del Servicio Penitenciario provincial fueron condenados a prisión perpetua por los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal 2.

“Los agentes están a la deriva, no se los respeta y no tienen protección. Los delincuentes parecen que tienen más beneficios que ellos”, sentenció la mujer.