Recuperadores urbanos, en crisis: preocupa el cepo a los precios y el aumento de las importaciones

Recuperadores urbanos, en crisis: preocupa el cepo a los precios y el aumento de las importaciones

Cooperativas de cartoneros o recuperadores urbanos advierten que el sector se encuentra en "situación crítica" y reclaman respuestas de parte del Gobierno

La baja del precio del cartón pone en riesgo al trabajo de 150.000 recicladores, una de los trabajos nacidos a partir de la puesta en marcha de planes de inclusión de sectores de la sociedad bajo la línea de pobreza o en la indigencia y que fueron alcanzados por la crisis económica del 2001.

En la actualidad, existen más de un centenar de cooperativas que, en todo el país agrupan a estos trabajadores que alguna vez fueron identificados como "cirujas" y que con el correr del tiempo fueron transformando esa necesidad de revolver la basura para encontrar algo que les permita sobrevivir en una nueva profesión, la del reciclaje.

Un trabajo que es mirado como una solución ambiental para reducir la cantidad de residuos que se entierran o se desechan al mar y que se encuentra organizado alrededor de estas cooperativas de "cartoneros" o recuperadores de cartón.

Actualmente, son reconocidos como "recuperadores urbanos" y encuentran en la figura de cooperativa una vía para formalizar su trabajo y atravesar los contextos desfavorables.

Estas agrupaciones tienen como misión lograr una reducción en el volumen de residuos para que la disposición final de esa basura sea la mínima.

Recuperadores urbanos: trabajo clave en un país con mucho residuo

Una tarea que se ha convertido en fundamental en un país como la Argentina que genera una tonelada de desechos cada dos segundos, algo así como 1 kilo diario por persona, según el Informe del Estado del Ambiente de 2017, elaborado por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación.

Sin embargo, un contexto de crisis económica como el que impulsó el nacimiento de esta nueva profesión, sumado a que el sector también sufre cepos a los precios y es impactado por el crecimiento de la importación de cartón ha puesto en alerta a las cooperativas de reciclado del país.

Cuáles son los principales ingresos de un reciclador

En marzo pasado, cada reciclador recolectaba cerca de 250 kilos por día de residuos reciclables, de los cuales, el 80% era cartón que luego se comercializaba para ser reciclado y vuelto a circular en el mercado.

Ocurre que ese material es el que se destaca en la recolección, representando casi la mitad del valor total comercializado y el 46% del peso total.

Luego se ubica el papel, en sus dos variantes: papel blanco (11% del valor, 7% de la cantidad) y papel de diario (11% y 12%, respectivamente).

Le siguen en importancia el PET −tereftalato de polietileno− (19% del valor y 9% de la cantidad) y el vidrio de color (2% y 15%, respectivamente).

El material reciclable de papel y cartón, conocidos como recortes, es un insumo fundamental en la industria papelera que elabora sus productos cada vez más con insumos reciclables, por una cuestión de costos, ya que es más barato.

El problema que actualmente enfrentan las cooperativas actualmente surge del precio interno al que se vende el cartón ya que siempre es más barato que el importado.

Un escenario que condiciona de manera directa la parte del salario que depende de la cantidad de material recolectado.

De hecho, el precio por kilo de cartón fue bajando entre $4 a $5 porque las empresas que compran ese producto se encontraban "sobre-stockeadas" y plantearon la necesidad de reducir los precios hasta en un 30%, después de cuatro meses de valores congelados e inflación en alza.

Las cooperativas de cartoneros o recuperadores urbanos se encargan de vender este a intermediarios conocidos como "galponeros" o "recorteros" que acopian el cartón que compran en pequeñas cantidades, para luego compactarlos y venderlos a la industria.

Escenario de incertidumbre

Pero el escenario de crisis económica, sumado al impacto que causó la pandemia del Covid-19 en la producción local y las mayores importaciones de algunos de los insumos de papel, terminaron por confeccionar un escenario de incertidumbre para esta profesión.

Más que nada a partir de un incremento de tres bienes clave para el sector como son los "recortes de papel" que aumentaron un 31%; el "papel Kraft en bobinas" que subió 17% y el "papel acanalado en bobinas", que se utiliza para el armado de cajas que en su mayoría proviene de Brasil y tuvo una suba del 113%.

En este sentido, desde la Confederación Argentina de Trabajadores Cooperativos Asociados (Conarcoop) se alertó sobre la baja del precio del cartón que podría afectar la continuidad de 150.000 puestos laborales.

Desde este sector plantean reducciones de hasta un 30% en el valor ofertado, luego de un cuatrimestre de precios congelados y una inflación que fue superior al 20% en ese período.

Según sostienen, esa situación golpea gravemente a la actividad, ya que el cartón representa entre el 60% y el 80% del ingreso de los recicladores.

Para el presidente de Conarcoop, Ramiro Martínez, este escenario se viene agudizando desde hace más de un mes por diferentes cuestiones.

"La principal, es el incremento de la importación de cartón, una política que se inició en el gobierno anterior y que, de alguna manera, persiste. A eso, se suma el aumento de los costos de traslado, siendo que la nafta se incrementó recientemente en un 10%. A su vez, el gasoil aumentó un 35 % en lo que va del año y un 10 en mayo", añadió el dirigente.

 

Martínez pidió que el problema sea abordado por el ministro de Desarrollo Productivo de la Nación, Matías Kulfas, y la titular de la Adminitración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Mercedes Marcó Del Pont, "quienes tienen incidencia sobre el incremento de las importaciones y la posible pérdida de fuentes de trabajo".

También les solicitó una reunión a ambos funcionarios nacionales de manera de que puedan conocer la problemática y tomar decisiones sobre las importaciones del sector.

"Los sectores más vulnerables y excluidos de la cadena productiva están siendo golpeados por esta política. A eso, se le incorpora la preocupación por el proceso inflacionario y el consecuente aumento de los costos de producción", alertó Martínez.

Para el dirigente, quien también es miembro fundador de la cooperativa de reciclaje Creando Conciencia de Tigre, esta situación se viene dando a lo largo de toda la Argentina.

"En varias provincias hay incertidumbre y mucha desazón. Es el caso de Entre Ríos, donde las papeleras ya ni siquiera están comprando cartón", concluyó.

La Capital, más complicada

 

La situación se tornaría más crítica en la Ciudad de Buenos Aires, donde el promedio de generación de residuos es casi del doble (1.9 kg), lo que lo ubica como la ciudad que más basura sólida crea en el país.

Actualmente, hay 12 cooperativas de cartoneros que trabajan la capital de la Argentina, que antes de la pandemia recuperaban 2.400 toneladas diarias de materiales, de las 8.000 que genera la ciudad cada día y que dan trabajo a cerca de 7.000 recolectores.

En CABA, cada cartonero percibe un ingreso mensual promedio equivalente a 1,85 salarios mínimos, según un informe de la Fundación Friedrich Ebert que analiza todo el circuito de recuperación de los residuos sólidos urbanos que llevan adelante.

Para alcanzar esa cifra deben recolectar 65 kilos de materiales por día, aunque sus "salarios" se componen de una parte fija y otra variable.

La primera representa el 54% del ingreso laboral total y la abona el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires en base a lo acordado con las cooperativas.

El resto forma parte del ingreso variable que depende de la cantidad de material recolectado y, de acuerdo al trabajo, incorpora un criterio distributivo ya que a partir de un promedio ponderado de los precios del total de los materiales recolectados se descuenta un porcentaje menor para cubrir parte de los ingresos de clasificadores y operarios de planta.

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