El amplio universo de vigiladores, custodios y trabajadores de seguridad privada vive horas convulsionadas por el creciente malestar que causa sobrevivir con bajos ingresos, soportar pésimas condiciones de trabajo y estar sufriendo permanentes humillaciones de sus superiores. Esta situación produce una importante migración hacia el Sindicato de Custodios con un perfil claramente combativo y con importantes beneficios para sus afiliados.

Hace pocos días se concretó el pase de Gonzalo Raúl Vives, un joven dirigente con un fuerte arraigo territorial en la Zona Sur del conurbano bonaerense. Los Custodios siempre apuestan a estructuras organizadas que le permitan el fortalecimiento del gremio, que ya demostró que no pretende ser una fuerza testimonial, sino que apuesta a la real disputa de poder con una fuerte construcción basada en delegados de base y en el funcionamiento de delegaciones y seccionales en todo el territorio nacional.

Desde la conducción del SUTCA cambiaron el histórico aislamiento de la dirigencia del sector por una política que privilegia el tejido de alianzas tanto políticas y gremiales sin descuidar su proyección en los barrios en donde casualmente viven sus trabajadores y trabajadoras. Y vaya que le ha dado resultado ya que al inicio del segundo mandato de Christian López se ha multiplicado por 20 la cantidad de afiliados cuando los empleados de seguridad privada ya comenzaban a perder la esperanza de un cambio y primaba mayoritariamente la resignación.