En las últimas horas, empresarios, comerciantes y autónomos de toda la provincia de Buenos Aires, incluyendo colegios privados y emprendedores de todo tipo, salieron al cruce del gobierno de Axel Kicillof, reclamando la suspensión de las restricciones impuestas por la gestión bonaerense siguiendo lo establecido en el decreto nacional publicado por el presidente Alberto Fernández. 

Las nuevas medidas dejaron un amplio abanico de actividades económicas en la provincia de Buenos Aires al borde de la quiebra. Sólo en el caso de los gastronómicos, que fueron uno de los rubros más golpeados durante el 2020, la obligación de cerrar a las 19.00 y sólo poder atender en lugares abiertos les quita más del 50 por ciento de la capacidad y los mantiene cerrados en el horario de mayor venta. “Es el tiro de gracia”, aseguraron a REALPOLITIK desde PULPA, la cámara que los nuclea.

En este escenario, lejos de mantener una imagen de austeridad que se solidarice con la situación por la que están atravesando las pymes bonaerenses, el jefe de Gabinete de la provincia de Buenos Aires, Carlos Bianco, se despachó con la licitación pública N°30-0042-LPU21, a través de la cual gastará 10.412.063 pesos en notebooks nuevas.

Acorde al pliego, las mismas serán destinadas “para uso de agentes que se desempeñan en diversas dependencias” de la jefatura de Gabinete. Bianco se propuso comprar 18 notebooks standard, 2 portables y 23 “advanced”. En total, serán cuarenta y tres computadoras a un precio promedio de 242 mil pesos cada una.

Según diversos comercios y proveedores dedicados a la informática, “en líneas generales el precio de éste tipo de computadoras oscila, en promedio, entre los 90 mil y los 120 mil pesos, algo menos de la mitad de lo que está dispuesto a pagar el jefe de Gabinete”.