La empresa Tecsan S.A anticipó que el próximo viernes abandonará de manera “inexorable” la operación y el mantenimiento del predio de disposición final de residuos, colocando a la gestión del intendente Carlos Arroyo en la obligación de resolver en las próximas horas quién y en qué condiciones continuará prestando ese servicio.

Si bien el gobierno local intenta desde hace meses cerrar un acuerdo con el Cemase, por el momento “no hay nada resuelto“, le confiaron a LA CAPITAL fuentes del Ejecutivo.

A pesar de que el tiempo apremia y de que el gobierno cuenta con una declaración de emergencia que le permite realizar una contratación directa, aún resta acordar cuál será el valor que el municipio pagará por el servicio y por las obras de ampliación requeridas para evitar que el relleno sanitario colapse.

Por eso todas las miradas apuntan al secretario de Economía y Hacienda, Hernán Mourelle, quien debe resolver si acepta o no la propuesta económica del Ceamse, que inicialmente ofreció hacerse cargo de la operación del predio y de realizar las obras pendientes por una suma de 12,5 millones de pesos mensuales.

“El es quien debe definir el tema presupuestario”, explicaron fuentes consultadas por este medio.

Tecsan S.A se encuentra a cargo de la operación y el mantenimiento del predio desde el año 2012 y si bien su contrato original ya se venció, la empresa sigue prestando el servicio a través de sucesivas prórrogas, la última de las cuales, concluirá este viernes.

El pasado 12 de abril, cuando se resolvió hacer una última extensión del contrato, la compañía dejó en claro que seguiría operando el predio “por 7 días más, con vencimiento inexorable el 20 de abril“.

Ese anuncio quedó expresado en un acta que Tecsan S.A firmó en la sede del Ministerio de Trabajo ante los dirigentes de los tres gremios que representan a sus operarios y el secretario de Gobierno de la comuna, Alejandro Vicente.

En ese documento la compañía realizó además otras observaciones inquietantes, como por ejemplo, advertir sobre el “inminente agotamiento” de la capacidad del módulo donde actualmente es dispuesta la basura, ratificando un dato que ya había sido señalado por el Organismo Provincial de Desarrollo Sustentable (OPDS).

Tras subrayar la gravedad del problema, los representantes de la empresa también se ocuparon de “deslindar todas las responsabilidades por las consecuencias ambientales” que puedieran surgir, solicitando que el municipio adopte medidas para asegurar una correcta disposición de los residuos.

Además Tecsan S.A le reclamó a la comuna el pago de una deuda por los servicios prestados durante el mes de febrero de este año.

Según lo previsto en el acta, los representantes de Tecsan S.A deberán acudir este jueves a las 11 al Ministerio de Trabajo para volver a encontrarse con los funcionarios municipales y los dirigentes del Sindicato de Camioneros, la Uocra y el Sindicato de Trabajadores del Medio Ambiente (AGOEC).

Se espera que en ese marco la gestión del intendente Arroyo explicite cuáles fueron los avances obtenidos en las negociaciones iniciadas con el Ceamse, en especial, en el aspecto presupuestario.

El encargado de resolver ese tema es Mourelle, quien hasta ahora parece no haber logrado un resultado, lo que genera inquietud dentro del propio gobierno.

A principios de este año, cuando Tecsan S.A anunció su decisión de abandonar la operación del predio el funcionario lanzó duras críticas contra la empresa para luego, avalar las reiteradas prórrogas de su contrato.

Además confrontó contra los gremios que representan a los trabajadores del predio, llegando a acusar a la UOCRA de haber provocado un incendio dentro del relleno sanitario.

Luego de eso cuestionó públicamente la propuesta del Ceamse y dejó trascender su intención de contratar a otras dos empresas privadas, lo que terminó siendo desechado.

La intervención del Ceamse, una compañía pública dedicada a operar los rellenos sanitarios de Capital Federal y el conurbano no es fruto de la casualidad.

Su aparición en escena se produjo a fines del año pasado luego de que el Organismo Provincial de Desarrollo Sustentable (OPDS) realizara una inspección en el predio y detectara serias deficiencias en su gestión y en sus instalaciones.

Entre otras cosas el organismo determinó que durante los últimos dos años habían sido cometidos serios errores en el proceso de disposición de los residuos, lo que provocó una disminución en la vida útil del módulo actualmente en uso.

Además determinó la existencia de un grave deterioro en las instalaciones y los equipos del predio, especialmente en las piletas destinadas al acopio de líquidos lixiviados, las cuales están a punto de “colapsar”.

Según se desprende de los informes del OPDS, en gran medida todos esos problemas obedecen a que la gestión del intendente Carlos Arroyo incumplió con la realización de las obras de ampliación previstas en el proyecto original.

Por eso el organismo, en su condición de autoridad ambiental de la Provincia, dispuso una “intervención”, instando al gobierno local a contratar al Ceamse para que además de operar el predio la empresa ponga en marcha obras que permitan “revertir” una clara situación de emergencia sanitaria.