Realizó un operativo en una planta de Solís 3251 donde detectó materia prima sin remito y obreros sin registrar. Clausura y decomiso. Hace dos meses instalaron un puesto de control en la salida del puerto. “Estamos construyendo una base de datos”, dijo el jefe de inspectores.
El operativo tuvo como epicentro una planta procesadora en Solís 3251. Roberto Durutovich anunció que era el propietario del establecimiento e intentó sin éxito oponer resistencia al paso de los inspectores de la Jefatura de Investigaciones de la Agencia.
Detrás ingresaron hombres de la Dirección de Aduanas, SENASA y hasta del Departamento Pesca del Distrito Descentralizado Vieja Usina de la Municipalidad. Los inspectores decomisaron más de 300 cajones de merluza e identificaron a 40 trabajadores en negro.
“Hace dos meses nos instalamos en la salida del puerto y estamos construyendo una base de datos en función de los remitos que muestran los camiones a la salida, en detenciones selectivas”, contó Eduardo Bellini, jefe de los investigadores de AFIP.
¿Cómo llegaron del puesto en el puerto a la planta de Solís? “Con tareas de inteligencia”, resumió el jefe. Desde hace más de una semana los inspectores que cubren el puesto seguían con sigilo el recorrido de algunos camiones y advirtieron que algunos no bajaban la carga donde decía el remito.
“El establecimiento no tenía habilitación de SENASA ni de la propia Municipalidad, que ya lo había clausurado hace un tiempo, pero seguía funcionando. Fue clausurado de manera preventiva por violación del artículo 35 inciso C de la Ley 11.683, de procedimiento fiscal”, detalló Bellini.
El Jefe evitó dar a conocer la empresa que había mandado la carga a esta planta y para quien luego se empaquetaría con destino a la exportación. Forma parte del secreto de sumario en la causa que se tramita en el Juzgado Federal Nº1, a cargo de Alejandro Castellanos, del Poder Judicial de Mar del Plata. El magistrado determinará los pasos a seguir con la información recolectada.
La llegada de los sabuesos al puerto marplatense forma parte de una política contra la evasión fiscal y el cumplimiento de normas sanitarias y laborales que impulsa el titular de la AFIP Mar del Plata, Sebastian Durrutti.
“No alcanzamos a avisar al Ministerio de Trabajo”, se excusó Bellini, aunque aclaró que su área estimará la deuda por aportes y previsiones que registraba el establecimiento para con sus trabajadores.
El sigilo de los inspectores fue tal que ayer ni en el SOIP tenían detalles ni alcance del operativo, que según anticipó Bellini “van a continuar”.
Comentá la nota