En el proyecto planteamos que el salario básico sea de $15.000 (sin sumas en negro), lo que se podría lograr por medio del aumento del presupuesto educativo provincial, mediante la inmediata suspensión de los pagos de la deuda externa, cuyos pagos en la provincia ascienden para este año a $25 mil millones", precisaron desde el FIT.

El Frente de Izquierda presentó ayer en la Legislatura su propia propuesta para solucionar el conflicto docente mediante una Ley de Emergencia Educativa que prevé, entre otros ítems, la suspensión del pago de los servicios de deuda para destinar unos 25 mil millones de pesos a llevar el salario básico docente a 15 mil, sin sumas en negro.

Mónica Schlotthauer, diputada de Izquierda Socialista en el Frente de Izquierda, dijo que la iniciativa tiene por objeto "la defensa de la educación estatal y el apoyo a la lucha docente".

"En el proyecto planteamos que el salario básico sea de $15.000 (sin sumas en negro), lo que se podría lograr por medio del aumento del presupuesto educativo provincial, mediante la inmediata suspensión de los pagos de la deuda externa, cuyos pagos en la provincia ascienden para este año a $25 mil millones", precisó.

De manera complementaria, la iniciativa prevé "la aplicación de impuestos a los grandes empresarios y terratenientes (impuesto inmobiliario) y la quita de subsidios a la educación privada". La salida "de fondo", habida cuenta de que se trata de un proyecto de emergencia, es, según el FIT, "la renacionalización del sistema educativo y el aumento del presupuesto educativo nacional al 25%".

Schlottahuer sostuvo que hay una "campaña" del Gobierno contra los docentes. "Macri utilizó el anuncio de los resultados del 'Operativo Aprender', organizado por empresas privadas, para intentar culpar a los docentes de los problemas de la educación", opinó.