El próximo miércoles, la gobernadora Lucía Corpacci participará de una nueva reunión de la “Liga de gobernadores peronistas” que buscan aunar posturas para evitar un poda multimillonaria a los recursos provinciales, si es que la Corte Suprema de Justicia de la Nación falla a favor del reclamo entablado por la provincia de Buenos Aires para declarar la inconstitucionalidad del tope de $650 millones del Fondo del Conurbano Bonaerense. En el encuentro, que se realizará en el Centro Federal de Inversiones (CFI), se espera la presencia de otros mandatarios provinciales no pejotistas como el santafecino Miguel Lifschitz y el rionegrino Alberto Weretilneck.

Uno de los puntos que analizarán los gobernadores es solicitarle al gobierno nacional que evalúe la modificación del esquema de subsidios. El pedido se justifica en que, en 2016, se repartieron $273.224 millones en el rubro de la energía y transporte y el reparto entre todas las jurisdicciones es evidentemente desigual, beneficiando notoriamente a la provincia bonaerense y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Otro de los temas que se tratará en el cónclave es el referente al impuesto al cheque. Sucede que este gravamen vence a fin de año y depende de que los gobernadores ordenen a sus legisladores votar a favor, que se pueda prorrogar.

Este impuesto, que es el tercero en el ranking de impuestos nacionales, por detrás del IVA y Ganancias, recaudó en 2016, $ 131.700 millones y el principal cuestionamiento sobre el mismo recae en que el reparto actual es del 70 por ciento para la Nación y del 30 por ciento para las provincias. Por esta razón, se solicitaría al gobierno una modificación en el criterio de distribución de lo recaudado.

Entre los puntos que modificaría la reforma impositiva propugnada por el ejecutivo nacional, está el de Ingresos Brutos. Si se confirman los rumores que indican que el presidente Mauricio Macri reduciría sustancialmente este impuesto, los gobernadores tendrán otro importante motivo de preocupación ya que el año pasado, las provincias recaudaron $ 328.000 millones por este concepto. Algo similar sucedería si se confirman las versiones de que la reforma incluiría también al IVA.

Otro de los aspectos por lo que los gobernadores podrían ejercer presión a Nación, para que encuentre una alternativa de otorgar los fondos reclamados por Buenos Aires sin resentir a los demás distritos, es el reclamo judicial que mantienen la mayor parte de las provincias por el retroactivo del 15% de Anses. Catamarca es una de ellas y desde el gobierno provincial, aseguraron que continuarán con el reclamo.

El último elemento de negociación de los gobernadores es la aprobación o no del presupuesto general que, antes de fin de año, debe ser sancionado por el Congreso y donde, una vez más, será clave la bajada de línea de los jefes territoriales.