El presidente del EPAS, Mauro Millán, confirmó que tienen programado un plan de recambio de cañería en un cuadrante comprendido entre las calles Islas Malvinas al norte, Richieri al sur y Gatica al oeste y Bahía Blanca al este de la ciudad.

El funcionario aseguró que todavía existen en Neuquén sectores con cañerías de hormigón o asbesto (una variedad impura del amianto) que requieren ser removidos por otros de PVC que tienen una duración de unos 50 años.

"En todo este sector se recambiarían las cañerías de agua. Es una inversión de 176 millones de pesos para la cual estamos buscando financiamiento. Ya cuenta con el proyecto ejecutivo de la obra", aseveró el titular del EPAS en diálogo con LU5.

 

Explicó que se diseñó ese cuadrante, que comprende una cantidad considerable de manzanas, y, por ende, de redes. "Estamos hablando de cañerías de 30.000 metros de diámetro, de 170 milímetros; y de 110 milímetros, 10.000 metros”, puntualizó el funcionario.

Es una inversión de 176 millones de pesos para la cual estamos buscando financiamiento

Millán dijo que esta obra forma parte del Plan Quinquenal, que fuera lanzado por el Gobernador Omar Gutiérrez hacia fines del año pasado y recordó que en el marco de este plan están comprometidas obras en el presupuesto del presente año en tanto que otras están en búsquedas de financiamientos externos y cuentan con el proyecto aprobado ya sea por el Banco Intercamericano de Desarrollo (BID) o por el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enohsa).

 

 

El titular del organismo provincial señaló que entre las obras que se están llevando a cabo se encuentra la de la Colectora II del Oeste. “Ya están los están los nexos de vinculación a la Colectora Central Máxima, aquella que hicimos por Independencia. Los nexos son las acometidas, esto ya es una obra que se está terminando en estos días”, adelantó.

Detalló que también está incluido en el presupuesto del EPAS el recambio de toda la Colectora Lanín, que consta de unos 3.000 metros de cañerías nuevos. Se colocará por calle Lanín dado que se trata de una cañería que data de la década del 80. “Se ha venido rompiendo, deteriorando por los gases que liberan los líquidos domiciliarios. Ahora se va a cambiar por una cañería de PRCV, poliéster reforzado con fibra de vidrio”, especificó Millán.