Si bien la selección automática de contenidos, que evita el acceso a materiales inapropiados para niños, se aplica desde que inició el plan Todos los Chicos en la Red hace 3 años, la modalidad era diferente. Las netbooks estaban configuradas para navegar solamente en la red provincial de Internet que extiende la AUI a toda la provincia y permite la conexión gratuita, incluso a través de Wi-Fi. De ese modo, desde el Data Center de la Autopista se controlaba el material al que podían acceder las netbooks.

Pero con la proliferación masiva de computadoras surgió la necesidad de que las máquinas pudiesen conectarse también a redes privadas. Esto originó la oferta de algunos comerciantes que cobraban por “desbloquear” o “liberar” la máquina del sistema original que aseguraba la navegación segura en la AUI.

El director de la AUI, José Jerez, explicó que la demanda de conexión de las computadoras a cualquier tipo red fue manifestada principalmente por escuelas privadas y por padres de alumnos que contaban con servicios privados de Internet en sus hogares.

“Las máquinas son unidas a un dominio, un grupo de servidores que controlan a las PC, y de esa manera se les carga la nueva configuración. Pero para que la aplicación quede operativa, los chicos tienen que conectarse al menos una vez a la red pública de San Luis. Pueden hacerlo en la escuela o en la antena más cercana de la red de Wi-Fi de la Provincia”, remarcó Jerez. Al respecto, agregó que cada 3 meses desde el Data Center se bajan actualizaciones a todas las máquinas.