La disposición forma parte de la batería de reclamos y medidas que enmarcan lo que parece ser el desborde definitivo de la crisis cíclica de la Cooperativa trelewense, que según sus directivos está al borde de la quiebra, como casi siempre le sucede..

Por eso, el viernes último en una comunicación al intendente, Máximo Pérez Catán, la prestadora le exigió "la cancelación de la todalidad de las acreencias" a su favor, ya sea en concepto "de consumo de servicios como obras ejecutadas" y la "resolución del cuadro tarifario que contemple los costos reales de los servicios concesionados".

La doble demanda exhibe, además, la fuerte presión del Sindicato de Luz y Fuerza, que amaga no sólo con la toma de las instalaciones para proteger los intereses de sus afiliados, sino con una "visita domiciliaria" a los funcionarios que considera responsables de la demora en la toma de las decisiones que exige para resolver la crisis.