La firma de la resolución 1057 por parte de la Ministra de Educación de la Provincia de Buenos Aires desató ayer una andanada de cuestionamientos porque, entre otras cosas, cambia la escala de calificación que se utilizaba en las escuelas bonaerenses: se elimina el "Mal" en primero, segundo y tercer grado; y se eliminan las notas numéricas de 1 a 3, en cuarto, quinto y sexto.    Por su parte, la titular de la cartera educativa de nuestra provincia adelantó: "nosotros seguimos con la misma escala. No pensamos en modificar la escala, que no está mal que lo haga alguna provincia porque en la otra escala, por lo poco que voy conociendo, se dijo que no aparecía el aplazo pero sí aparece".    "Se aclaró que eran más de las notas de desaprobados en esa escala que las de aprobados. Entonces dijeron 'si 4, 5 y 6 son desaprobados, partamos de esa base'", aclaró Silvia Rojkés de Temkin.    "Acá seguimos del 1 al 10, no está en nuestro objetivo modificar la escala. Tendrán sus motivos la gente del Ministerio de la Provincia de Buenos Aires para hacerlo, no los conozco en profundidad", reiteró.    "Un régimen de escuela del siglo XIX para alumnos del siglo XXI"    "Debemos tener una mirada distinta sobre el rol de la educación porque a la escuela siempre se le pide transformación, que debe acompañar los cambios, que debe tener una dinámica porque la sociedad a partir de la actividad cultural, de los avances tecnológicos y científicos así lo requieren", expresó, al tiempo que señaló: "pero cuando la escuela intenta hacer un cambio cuesta mucho más tiempo, entonces vuelve a tener una educación o un régimen de escuela del siglo XIX para alumnos del siglo XXI.    "Más allá de esta medida lo que se está haciendo mucho en educación son cambios muy profundos pero trabajados directamente desde las escuelas, pero que pasan por otro lado, no por la nota. Pasan por ese trabajo permanente día a día desde la trayectoria escolar, es decir cómo están los chicos hoy, qué les damos, qué les exigimos, qué se profundiza, pero eso también implica esa capacitación permanente como la estamos haciendo en la provincia con los docentes, que son los que están en el aula todos los días con nuestros chicos", añadió.    "Pero eso también implica cambios a nivel de la comunidad en la que está inserta la escuela. Por ejemplo, los padres tienen que estar a la par de la escuela trabajando con sus hijos, consultando con los docentes", remarcó la ministra.    Balance de la capacitación docente del lunes pasado    "Estamos trabajando dentro de un programa que son encuentros de trabajo en las escuelas dentro del programa 'Nuestra Escuela' y que continuará. Es la participación más directa que tiene el docente para trabajar sobre su propia escuela donde siempre debe impactar las mejoras en las trayectorias de los chicos", afirmó.    La ministra dijo: "en la última reunión el rol de coordinador del equipo lo vuelve a asumir el directo, para eso se están capacitando a lo largo de este año. Se van proponiendo esrtategias y proyectos que surgen del equipo docente, como también capacitaciones para ellos mismos, para mejorar su escuela en ese contexto dentro de los lineamientos generales que abarcan a todas las escuelas de la provincia. Está muy bueno que suceda esto".    "La escuela debe seguir siendo abierta, qué de acceso a todos, posibilidades y oportunidades, que se trabaje desde la diversidad", sentenció la funcionaria.