Cartoneras en las playas concientizan sobre reciclado

Cartoneras en las playas concientizan sobre reciclado

En las playas correntinas se puede ver, los fines de semana, a un grupo de mujeres que instala un stand informativo y que concientizan a los bañistas de la importancia de la clasificación de los residuos para su reciclaje. Ellas son promotoras ambientales y forman parte de la cooperativa ambiental Corrientes Recicla, que depende de la Federación Argentina de Cartoneros, Carreros y Recicladores (Utep).

EL LIBERTADOR habló con las integrantes y dirigentes del grupo para conocer más acerca de su labor ecológica y la realidad de la contaminación ambiental que generan los ciudadanos al no saber clasificar y desechar correctamente sus residuos en la vía pública y, en muchos casos, en el mismo ecosistema.

Las promotoras ambientales de esta cooperativa estuvieron recorriendo las playas de la Capital, dando información sobre la importancia de separar en origen y el rol que cumplen los cartoneros y cartoneras en el reciclaje. En estos espacios, donde se acerca el vecino y el turista, también les cuentan sobre cómo es su circuito de recolección en la ciudad.

Se trata de la iniciativa Playas Limpias, que también realizan los cartoneros en varios puntos del país, en articulación con los programas Argentina Recicla y Mi Provincia Recicla.

En el proyecto nacional están 15 mujeres de esta cooperativa correntina, quienes todos los viernes, sábados y domingos, se instalan en las playas capitalinas. «Les comentamos a la gente de la importancia de no dejar los residuos en la playa y en la calle, porque cada uno debemos ser responsables de la basura que generamos», dijo Alejandra, promotora ambiental de Corrientes Recicla.

«Estamos desde las 5 hasta las 9 de la tarde en una mesita. Cuando estamos con el stand en la playa, entregamos algunos presentes para los niños que traen materiales reciclables», explicó Daiana Acosta, miembro de la cooperativa. «Se le entrega un juguete a los niños y una planta a los adultos o vasitos para tereré a los que colaboran, que salen del cuerpo de promotores ambientales», agregó.

«Contamos a la gente qué hacemos con esa basura que recolectamos. Queremos fomentar el cuidado de la naturaleza en nuestra provincia y mantener activa la participación ciudadana en el cuidado del medio ambiente, comunicar sobre qué materiales se pueden reciclar», remarcó Alejandra.

Por su parte, Daiana aportó: «Concientizamos a los vecinos y a la gente para que sepan sobre el tratamiento que le damos al material reciclable. Les enseñamos sobre cómo separar en sus casas, para que puedan facilitar el trabajo al recuperador, ya que una de nuestras problemáticas es que la gente mezcla todos los residuos, entonces algunos compañeros rompen la basura y a veces se cortan con los vidrios».

Al referirse a este inconveniente, ambas manifestaron que es de suma importancia para los cartoneros, que los materiales reciclables no se pierdan entre los no reciclables y que, en la medida de lo posible, se coloquen los vidrios en cajas y los plásticos y latas, en bolsas aparte.

Para ser promotoras ambientales, las cartoneras hacen una capacitación previa en la cooperativa, ya que son elegidas dentro de los 25 barrios que integra la agrupación de recolectores. «Estudiamos todo lo referente a la contaminación ambiental y podemos dar charlas en los colegios, jardines, estaciones de servicio y otros barrios», comentó Alejandra.

«Hace más de 10 años funciona el programa de las promotoras ambientales en Buenos Aires y ahora llegó a las otras provincias. Buscan que las mujeres sean reconocidas en el mundo del reciclaje y el cuidado del medio ambiente», indicaron.

Una cooperativa recuperadora 100% local

La cooperativa Corrientes Recicla está legalmente constituida desde el año 2021 y la constituyen alrededor de 400 cartoneros de diferentes barrios capitalinos y del Interior. Funciona en 25 barrios de la Capital y en 10 localidades de la provincia, entre las que se encuentran Saladas, Empedrado, Itatí, Itá Ibaté, Concepción, Paso de los Libres, Esquina y Bella Vista, cada una con sus respectivas promotoras ambientales.

La cooperativa Corrientes Recicla, en Capital, se ubica en el barrio Paloma de la Paz, por calle Ex Vía y calle Urquiza, entre Berazategui y Pergamino, detrás de la terminal. Nuclea a más de 300 compañeros recuperadores urbanos, donde tienen guardería, un área de jóvenes adictos, violencia de género y máquina enfardadora de los materiales reciclables.

Su función en la sociedad es importante, ya que reciclan a diario cartón, plásticos PET, vidrios, latas de aluminio, botellas de gaseosas y de lavandina, todos materiales con distinto valor, que se les paga a los recolectores. Es un proceso en el que, una vez reunidos los residuos, se hace la clasificación de esos materiales y según su variedad. Allí son enfardados y luego esos materiales se comercializan, volviendo a la industria para convertirse en nueva materia prima.

«Estuvimos en la Fiesta del Chamamé, donde la Municipalidad nos cedió el espacio para la recolección, entregamos folletos y concientizamos para que no dejen tirada la basura. Con la colaboración de la gente, tuvimos mucho material que pudimos juntar», contó Alejandra, quien confirmó que también están en los Corsos Barriales y Oficiales, con la misma tarea.

Además, aclararon que no tienen color partidario ni respaldo político. «Somos una cooperativa que funciona a pulmón. Incluso, tenemos algunos inconvenientes para entrar a las escuelas a dar charlas porque nos suelen asociar a ciertos partidos políticos. Así que, los promotores estamos en las plazas, en la costanera, en los espacios públicos», explicó Daiana.

Las botellas y colillas, al río

«Una botella descartable en nuestro río contamina 62 litros de agua, imagínense toneladas de botellas», dijo Daiana.

Estamos teniendo una problemática con las bolsitas de PET, que contaminan 2 mil litros de agua. Hacemos esa concientización, pero algunos siguen tirando ¡y cuántas tiran por fines de semana!, la contaminación que tenemos es muy grave», señalaron preocupadas las promotoras ambientales.

También, indicaron que otro de los desechos más frecuentes son las colillas de cigarrillos: «La cantidad que hay en la playa, una colilla puede contaminar hasta 50 litros de agua. Y eso que hay colilleros, pero prefieren tirar en el agua, piensan que se diluye, pero eso tiene sustancias muy fuertes», lamentó Daiana.

«Esas cosas dan bronca porque las promotoras ambientales sabemos la contaminación grave que hay, pero sigue pasando y molesta la falta de educación», remarcó la promotora. Por el contrario, notaron que muchos jóvenes y niños se acercan interesados por escucharlas y son los más colaboradores en las playas que visitan.

Comentá la nota