Las expectativas del sector petrolero sufrieron un nuevo revés y habrá que seguir esperando resultado de las negociaciones paritarias ya que se abren antiguas discusiones operativas que es necesario zanjar, pese a que el porcentual de aumento estaría cercano a un acuerdo.

La discusión de ayer volvió a pasar a un cuarto intermedio hasta el viernes próximo, compás de espera que sería “el último plazo”, debido a que desde el gobierno nacional, a través de Rogelio Frigerio, se emplazó el resultado de la paritaria solicitándose que “para el comienzo de la próxima semana, el tema debe estar cerrado”, según señaló ayer el titular del sindicato petrolero Jorge Ávila.

Al término del encuentro, el líder sindical aseguró que “se está lejos en consensuar garantías de estabilidad laboral en el sector Torres”, agregando que “si se mantiene la idea de bajar 14 equipos de Santa Cruz, la negociación se resiente notablemente”.

Por otra parte, aseguró que “la firma de un acuerdo salarial con la Cámara de Empresas Petroleras no está demasiado lejos pero, lo que no se garantizan son los puestos laborales”, adelantando un virtual acuerdo en términos de porcentaje pero lamentando que las empresas “no ofrezcan garantías de actividad laboral en la Cuenca del Golfo San Jorge”.

La reunión de ayer se prolongó por algo más de tres horas, tiempo en los que se volvió a discutir “viejos reclamos empresarios que creíamos superados” señaló Ávila, graficando los pedidos en situaciones como trabajo con viento transporte en horarios nocturnos o el ingreso de gente de otra provincia, lo que oportunamente se consensuó y quedó escrito “por lo que no las podemos aceptar”.

Respecto al porcentual de aumento solicitado por el gremio, Jorge Ávila confirmó que el reclamo sindical es de “un 32% y aunque las operadoras ofrecen un aumento de entre el 26 y 28%, la discusión final no estaría lejana” agregando que “los trabajadores tienen que quedarse tranquilos porque van a cobrar retroactivo a marzo”.