Por: Fernando Cibeira.

Superada la pandemia y el difícil test de las elecciones legislativas 2021, volvió a tomar cuerpo la idea de institucionalizar el Frente de Todos con la creación de una mesa política en la que estén representados todos los sectores y que sirva para administrar las diferencias internas antes de que tomen estado público. Junto a esa iniciativa, también sumó apoyos la posición de que la candidatura presidencial del oficialismo en 2023 se resuelva a través de una gran PASO en la que puedan presentarse todos los que quieran. Como comentaba un funcionario, el resultado de los comicios mostró que el Frente de Todos sigue vivo y que será el instrumento a través de la cual el peronismo buscará su continuidad en la Casa Rosada, "así que hay que resolver cómo afinarlo".

El tema resurgió en el encuentro que se realizó el lunes en la sede del PJ convocado por el jefe de Gabinete, Juan Manzur. Alrededor de la mesa se congregaron funcionarios del entorno del presidente Alberto Fernández como el canciller Santiago Cafiero y el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello, otros más cercanos a la vicepresidenta Cristina Kirchner como el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro, y el ministro de Desarrollo bonaerense, Andrés Larroque. Junto a ellos se ubicaron la conducción de la CGT, de la CTA y representantes de movimientos sociales. En un clima de mucha cordialidad terminaron de acordar la convocatoria conjunta al acto de hoy en la Plaza de Mayo, que se espera multitudinario. Tan bien resultó todo que, hacia el final, se planteó la propuesta de convertir ese encuentro en un ámbito permanente de conversación.

Obviamente, quienes se mostraron más interesados fueron los sindicalistas y dirigentes sociales, que no participan de los ámbitos formales de poder. Pero fue convalidado por todos, que coincidieron en la necesidad de avanzar en la institucionalidad del Frente de Todos, algo que comenzó a conversarse en los primeros meses de gobierno pero luego quedó trunco con la aparición de la pandemia. Hay quienes piensan que deberían ser dos mesas. Una mesa "chica", en la que Alberto, Cristina, Máximo Kirchner, Sergio Massa, Juan Manzur y quienes ellos consideren, dedicada a las cuestiones estratégicas de la gestión. Y luego esta mesa ampliada, representativa de todos los sectores del Frente, en la que puedan discutirse las políticas del oficialismo. Obviamente, habría que sumar también representantes de los gobernadores y de los intendentes. 

Roberto Navarro anticipó en El Destape el día antes de las elecciones que las intenciones del Presidente iban por este mismo camino. Por un lado, institucionalizar el Frente de Todos y, por el otro, resolver que las próximas candidaturas salgan de las primarias. "Tenemos que ir a una gran PASO en 2023 para dirimir el poder interno en el peronismo. Hay que institucionalizar la coalición e ir a hacia una especie de Frente Amplio con todas las miradas: desde Sergio Massa hasta Juan Grabois y con toda la fuerza de Cristina", citó allí a Fernández. 

El domingo, la recuperación electoral revalidó al Frente de Todos como la herramienta adecuada para el peronismo de cara a las elecciones presidenciales. "A nadie que haya ido por afuera le fue bien. Está muy claro que el Frente de Todos es lo más fuerte que tenemos. Pese al desastre que dejó Macri y la pandemia, el domingo demostró que sigue siendo competitivo. Si hacemos las cosas más o menos bien, las chances de ganar son muy altas", analizaba un hombre cercano al Presidente. Evaluaban como lógicas los deseos de gobernadores e intendentes que se sentían parte de la recuperación de los votos de tener una mayor participación. 

Uno de los que salió a apoyar que el próximo candidato salga de una PASO fue el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, protagonista de una impactante elección en la que consiguió dar vuelta una derrota por nueve puntos en las primarias. "Es necesario pensar que la elección del 2023 está a la vuelta de la esquina y el compromiso de trabajo empieza hoy. En ese sentido, las PASO deben ser garantizadas para que tengamos la fortaleza del liderazgo de los candidatos presidenciales que emerjan en esa disputa política", sostuvo el chaqueño, quien ayer se reunió con Fernández y con Manzur en la Casa Rosada. Además se sumó al pedido de institucionalización del Frente para evitar la "dispersión" del peronismo. 

Por el despacho de Manzur también pasaron el jefe de gabinete bonaerense, Martín Insaurralde, y los intendentes Fernando Espinoza (La Matanza), Alejandro Granados (Ezeiza), Alberto Descalzo (Ituzaingó), Juan José Mussi (Berazategui) y el diputado nacional electo y ex intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra. Todos destacaron el trabajo territorial que, según su criterio, permitió la remontada en el Conurbano y avalaron la idea de las PASO. "Hoy por hoy hay un concierto de opiniones donde creemos que las PASO pueden ser una muy buena opción”, subrayó Pereyra.