Sin voces disidentes, con la tropa alineada y su hijo Pablo como compañero de fórmula, Hugo Moyano obtuvo ayer su séptima elección consecutiva en la Federación Nacional de Camioneros, el bastión sindical desde donde construyó su poder a partir de 1987.

La revalidación del poder de Moyano entre los camioneros se concreta en la misma semana en que Mauricio Macri reclamó "renovación sindical" y aggiornar los convenios colectivos de trabajo. En la sugerencia del Presidente a los dirigentes se esconde una contradicción: sus interlocutores gremiales más frecuentes son Moyano y Luis Barrionuevo, quienes están al frente de sus gremios desde 1987 y 1979, respectivamente. Macri privilegió, incluso, el diálogo íntimo con ellos antes que con sus sucesores de la CGT unificada , quienes, en la teoría, encarnan el recambio.

Casi como desde siempre, Moyano fue secundado en la fórmula por su hijo Pablo. La lista 15 de Diciembre fue la única postulante. La votación se desarrolló en el hotel Intersur, de Mar del Plata, donde asistieron los congresales de todas las seccionales que camioneros tiene en el país. En algunas seccionales del interior comenzaron a surgir focos opositores, pero se trata de disputas domésticas. A nivel nacional todos comulgan con el moyanismo.

El nuevo mandato de la fórmula Moyano-Moyano será de 2016 a 2020. En algún momento se especuló con que Pablo sea la cabeza, pero esa idea jamás tuvo consenso interno para avanzar. Hugo, de a poco, le delegó tareas a su hijo, pero está aún lejos de abandonar el poder.

Pablo Moyano está desde hace un tiempo con un mayor protagonismo por la función de su padre como gestor deportivo de Independiente. Sin embargo, en la CGT unificada no logró el aval de los otros bastiones para ser parte del triunvirato de mando. Ocupó, finalmente, la secretaría gremial, desde donde tiene cierta ascendencia directa con las centrales del interior.

Pablo Moyano tomó distancia del triunvirato de mando de la CGT y se ausentó a las tres últimas reuniones de consejo directivo. Criticó el acuerdo por el bono de fin de año y el compromiso antidespidos hasta marzo. Intentó hasta último momento forzar el llamado a un paro, pero hasta su padre lo desautorizó. La intervención de Hugo dejó en claro que su influencia en la central obrera sigue intacta.

Moyano se despidió después de tres mandatos en cadena al frente de la CGT, algo inédito. Se fue como garante de la unidad, y así aparecerá en un documental propio que se está filmando sobre su trayectoria gremial, política y deportiva. El autohomenaje se estrenaría en el Luna Park, el 15 de diciembre, en el Día del Camionero.