Elon Musk y la lluvia de inversiones que espera Javier Milei

Elon Musk y la lluvia de inversiones que espera Javier Milei

La Casa Rosada le prometió la llegada de capitales a la CGT. El mensaje de Toto Caputo que empujó al paro. Salarios en rojo y advertencia libertaria.

Por: Gabriela Pepe.

La figura de Elon Musk se coló en la charla entre funcionarios y sindicalistas en la Casa Rosada. Entre pedidos de moderación en las paritarias y explicaciones sobre el modelo económico, Nicolás Posse, Guillermo Francos y Santiago Caputo dijeron que Javier Milei espera una lluvia de inversiones que apuntalará el despegue argentino. Citaron, como ejemplo, los dólares que estaría dispuesto a aportar el fundador de Space X, a quien el Presidente y Karina Milei fueron a visitar este viernes a Texas.

“Es un gran placer para mí. Es increíble. Gracias por todo lo que hacés por el mundo”, le dijo Milei a Musk, con devoción, cuando lo recibió en la fábrica de autos de Tesla, una de sus empresas emblema. Después, el mandatario alcanzó su sueño. “¿Quieren sacar algunas fotos?”, preguntó el magnate. Y posaron juntos, con los pulgares en alto, en una imagen que dio la vuelta al mundo.

No hubo anuncios concretos sobre inversiones, aunque fueron parte de la conversación. El magnate está especialmente interesado en Argentina porque tiene una de las reservas más grandes del mundo en litio. Acordaron que buscarán “oportunidades”. Mientras, coincidieron en la necesidad de “eliminar trabas burocráticas” para las inversiones y promover la libertad de mercado.

El Presidente se ofreció hasta a ayudarlo en el conflicto que tiene Twitter con el Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil. La Justicia brasileña ordenó el bloqueo de mensajes de simpatizantes de Jair Bolsonaro por considerar que instigaron al golpe de Estado contra el presidente Luiz Inácio Lula Da Silva. Musk pidió por la destitución de uno de los ministros de la Corte, Alexandre de Moraes. Esta sábado el empresario entrevistó a Bolsonaro.

El candidato de Milei a ocupar la embajada argentina en Estados Unidos, Gerardo Werthein, dijo que la sintonía entre Milei y Musk fue tan grande “como si se hubiesen juntado dos almas gemelas”. El magnate visitará la Argentina en el segundo semestre y participará junto al Presidente en un “gran evento para fomentar las ideas de la libertad”.

La segunda lluvia de inversiones

La primera conversación formal entre el Poder Ejecutivo y la CGT en cuatro meses de gestión libertaria había terminado en buenos términos. Los funcionarios pidieron disculpas por las desinteligencias ocurridas hasta el momento, hubo coincidencias respecto de la posibilidad de avanzar en una reforma laboral.

La central obrera vio con buenos ojos la participación del asesor Santiago Caputo, el representante más fiel de Milei. Francos hizo gala de sus relaciones políticas. Posse fue el encargado de explicar el plan económico. Habló de las expectativas de desaceleración de la inflación. Fue optimista en sus proyecciones. Dijo que el consumo se desploma, en parte, porque la sociedad no convalida el aumento desmesurado de los precios. En marzo, el consumo masivo bajó un 19% medido de forma interanual.

Los funcionarios ratificaron que no habrá devaluación, a pesar de que los voceros del agro lo piden abiertamente. “Las 100 millones de toneladas que tenemos que movilizar solo van a salir de los campos, los acopios y las cooperativas si conseguimos un mejor precio”, dijo a principios de abril el presidente de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina y del Centro de Exportadores de Cereales, Gustavo Idígoras.

Se calculaba que el monto que debería entrar en abril por la liquidación de granos debía rondar los 20 mil millones de dólares, aunque las últimas proyecciones hablan de cifras menores. Para incentivar la operación, el ministro de Economía, Toto Caputo, anunció esta semana que avanzará en la eliminación de los aranceles aplicados a la importación de fertilizantes.

El ingreso de divisas es crucial para la recomposición de reservas del Banco Central. Este mes, Argentina tiene que afrontar vencimientos por 1.940 millones de dólares con el FMI, entre otros compromisos. Sin embargo, algunos sindicalistas salieron el miércoles de la Casa Rosada con la idea de que el Gobierno piensa que puede prescindir de la liquidación del campo porque apuesta todo a las inversiones en otros sectores de la economía. Allí entra en escena Musk, uno de los mencionados durante la reunión.

A eso apunta, entre otras cosas, la ley ómnibus XS, que la Cámara de Diputados llevará al recinto posiblemente la última semana de abril. Miguel Ángel Pichetto dijo este viernes en Radio Con Vos que el texto acordado es “más lógico” que el inicial y que tiene muchas chances de ser aprobado. Destacó entre los ejes el régimen de grandes inversiones (RIGI) “que tiene como destinatarios al sector petrolero, gasífero y minero que puede alentar” la llegada de capitales. Agregó que eso le dará herramientas a Milei para gobernar y para que deje de utilizar a la oposición y al Congreso “como chivo expiatorio”.

En el Gobierno estiman que la ley saldrá acompañada por una baja más pronunciada del riesgo país, que cerró el viernes en 1.331 puntos básicos. Dicen que el ingreso de divisas y la vuelta a los mercados se darán cuando llegue a 800. Mayo será un mes clave. El Presidente espera la llegada de Larry Fink, el CEO del fondo de inversión BlackRock.

Caos en la economía real

El optimismo de los funcionarios dejó pensando a varios de sus interlocutores, que ya habían escuchado la promesa de la lluvia de inversiones durante el gobierno de Mauricio Macri. Esta vez juran que sí saldrá bien. El camionero Hugo Moyano fue el que más dudas planteó durante el encuentro.

El conflicto con Camioneros fue la razón de ser de la reunión, de la que también participó el secretario de Trabajo, Julio Cordero. En la previa, el Gobierno se había negado a convalidar el aumento del 45% que el gremio cerró con las cámaras empresarias para marzo y abril. Camioneros había amenazado con un paro. La plana mayor de la CGT acompañó a Moyano en sus reclamos ante la Casa Rosada. El líder sindical conversó en buenos términos con Cordero.

Después de las exposiciones que hicieron eje en las proyecciones que dan la inflación a la baja, la reunión terminó con la promesa, por parte del Ejecutivo, de destrabar el conflicto. Faltaba la palabra final del ministro Caputo. Pero el clima ameno entre la CGT y el Gobierno duró menos de 24 horas.

El jueves por la mañana, Cordero recibió en la Secretaría de Trabajo a Hugo Moyano Jr. -Huguito-, abogado del gremio. El secretario trasladó el mensaje de Caputo. El Gobierno se ofrecía a convalidar el acuerdo cerrado en tanto y en cuanto el gremio se comprometiera a firmar ahora, por adelantado, el cierre de aumentos de 2% para mayo y 2% para junio, con la idea de alinear expectativas inflación a la baja.

“Ni en pedo”, comunicó Pablo Moyano al Consejo Directivo de la CGT, que se reunió el mismo jueves en Azopardo y definió un llamado al paro general para el 9 de mayo, una decisión que se tomó con acuerdo de todos los sectores, que ven que la única decisión clara del Gobierno es la de bajar la inflación a costa de pisar los ingresos.

“El Gobierno quiere instalar que la inflación se derrumba, pero es todo fe”, le dijo a Letra P un hombre del sindicalismo. Sin embargo, la fecha del paro, todavía lejana en el tiempo y posterior a la marcha del 1 de mayo, que se espera que sea masiva, marca que todavía existe voluntad de negociar. El Gobierno también quiere evitar un paro general de Camioneros y sus derivaciones.

Alertas propias

“Treinta días”. Es el plazo que un hombre de La Libertad Avanza (LLA) en el Congreso dice que cree que tiene el Gobierno para mostrarle algo bueno a la sociedad, que empieza a perder la paciencia. “Esto es como una quimioterapia. Pero hay que mostrar que sirve para curar el cáncer y que vamos a empezar a salir, porque la gente no va a aguantar mucho más”, grafica ante Letra P.

Esta semana se conoció que el poder adquisitivo de los salarios cayó casi 24% entre noviembre y febrero y quedó en niveles similares a la postcrisis de 2001. Así se desprende del índice de Remuneración Imponible de Trabajadores Estables (RIPTE). El viernes, el Gobierno celebró el índice de inflación de marzo, que fue del 11% y marcó una desaceleración respecto del mes anterior, aunque estuvo un poco por encima de lo que se pretendía.

En la CGT tomaron nota de la distancia que hay entre lo que el Gobierno pretende que suceda y la realidad. “A ningún consultor le da 2% de inflación en mayo y junio, es un delirio”, apuntan en el sindicalismo.

Pese a eso, los niveles de tolerancia social a un ajuste sin precedentes se ven en las encuestas que marcan que, en promedio, el Presidente todavía tiene un apoyo que va entre el 45 y 50%. Sin embargo, los números que maneja la Casa Rosada empiezan a mostrar algunos indicadores que encendieron las alarmas, como el rechazo a la liberación de precios, con el caso paradigmático de las prepagas.

Eso explica, en parte, la reacción del ministro Caputo, que dijo que las prepagas “le declararon la guerra a la clase media”, y el aviso de la Superintendencia de Servicios de Salud de que evaluarán “una serie de medidas para llevar a cabo a partir de presuntas prácticas abusivas" por parte de las empresas de medicina. Todavía no se anunció cuáles serían, si es que existieran, y cómo impactaría en los precios de las cuotas.

Entre los sondeos de opinión que circularon esta semana, figura un estudio de Ágora en el que los encuestados marcaron las prioridades que, consideran, debería tener el Gobierno. Las cinco primeras son ingresos y sueldos, jubilaciones, manejo de la economía, inflación y empleo. En tanto, en una encuesta de Proyección Consultores, una mayoría abrumadora dijo tener como preocupación principal “inflación, precio de los alimentos y otros gastos básicos del hogar”.

La encuesta de Agora marca que la preocupación de la sociedad por la caída de los ingresos.

Voces afines al oficialismo con recorrido en la política emitieron señales de alarma en las últimas semanas ante el panorama que empiezan a ver en el territorio. Bloqueo de fábricas, una conflictividad social que crece, despidos, y el impacto que tendrá en las próximas semanas la llegada de las boletas del gas, con aumentos astronómicos. A eso se suma la “gran marcha nacional universitaria”, convocada para el 23 de abril, en Plaza de Mayo. “Cristina Kirchner y el peronismo están conteniendo el conurbano. La gente está enojada, no tiene un peso y nadie mueve un dedo. ¿Hasta cuándo va a durar eso?”, se pregunta un dirigente libertario.

El control remoto de Karina Milei

A las malas noticias económicas, esta semana la administración libertaria le sumó la exhibición pública de las peleas internas que el oficialismo había logrado esconder hasta ahora debajo de la alfombra. En la Casa Rosada le bajaron el tono: dicen que a la sociedad no le interesan las peleas de palacio.

El miércoles, el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, desautorizó al hasta entonces titular del bloque oficialista, Oscar Zago, cuando decidió suspender sobre la hora la celebración de la reunión de la comisión de Juicio Político. Con acuerdo de Milei, Zago había anunciado que impulsaba para la presidencia del cuerpo a la diputada libertaria Marcela Pagano.

Pero Menem recibió una contraorden de Karina Milei, que estaba junto al Presidente en Miami, donde ambos fueron nombrados "embajadores internacionales de la luz”, rótulo que les otorgó una comunidad judía ortodoxa. La secretaria general de la Presidencia fue quien vetó el nombramiento de Pagano, a quien no considera una libertaria pura.

“Confiamos más en Bertie (Alberto Benegas Lynch)”, dijo la diputada Lilia Lemoine, en línea con “El jefe”. No quedó claro si fue en acuerdo con el Presidente, que le había prometido el lugar a Pagano. El mandatario dice siempre que la palabra final la tiene su hermana. “My sister, the boss (mi hermana, el jefe)”, se la presentó el viernes a Musk.

Javier Milei y su hermana, Karina Milei, durante la visita que hicieron juntos a Tesla.

Los resultados del desaguisado fueron la expulsión de Zago de la jefatura del bloque y su reemplazo por el cordobés Gabriel Bornoroni, otro dirigente alineado con Menem y Karina, y la ruptura del bloque, por parte del extitular de la bancada. El viernes, Zago anunció la conformación del bloque Movimiento de Integración y Desarrollo (MID), junto a otros dos legisladores. Por ahora, el MID armará un interbloque con LLA.

Zago y Menem llevaban meses de desacuerdos, un problema para el funcionamiento interno del oficialismo. El movimiento mostró la ferocidad inapelable de Karina y su sólida sociedad con Menem para la construcción de la línea pura libertaria, de cara a las elecciones 2025. Pero dejó algunos interrogantes en los bloques dialoguistas, que vieron zambullirse al oficialismo en un escándalo, mientras el Gobierno pide la colaboración de la oposición.

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