Hasta el momento la empresa no ha informado los motivos del cierre de esta planta, que distribuye los productos en parte de la zona norte del conurbano y la provincia. Trascendió que solo ofreció indemnizaciones y la posibilidad -a algunos trabajadores- de ser reubicados en otras unidades operativas pero de forma temporal, sin reconocer a antigüedad y solo si pasan el apto físico.

Tanto el sindicato de aguas gaseosas como la municipalidad dicen desconocer el cierre. Trabajadores enrolados en la Agrupación Marrón de Aguas Gaseosas exigieron al sindicato Sutiaga y la federación Fataga un plan de lucha nacional para enfrentar los despidos, ya que este cierre -además de dejar sin trabajo a 200 personas- incrementará el volumen de trabajo en otros lugares, sin descontarse que la empresa haga uso de personal tercerizado en condiciones de precariedad, acorde a los lineamientos que quiere imponer del Gobierno de Cambiemos.