En los últimos días, unos 120 trabajadoresmunicipales perdieron sus empleos, según se confirmó oficialmente. 

En todos los casos, los despedidos tenían contratos que finalizaron y no fueron renovados, aunque revistaban con diferentes modalidades. En una de ellas, la que involucra a más trabajadores, el Sindicato Municipal está manteniendo reuniones con funcionarios en busca de que, al menos algunos, sean reincorporados.

La mayoría de los despedidos habían sido contratados para realizar tareas de poda. Se trata de 85 obreros que se habían incorporado en mayo, la época más fuerte para esa actividad. 

Desde el Municipio explicaron que todos los contratos tenían plazo fijo, por lo que debían extinguirse el 30 de septiembre.

De todos modos, como los trabajos de poda este año se extendieron un poco más de lo habitual, los contratos se prolongaron hasta el 31 de octubre. Pero ya vencieron.

Varios de los trabajadores que perdieron su fuente de ingresos se pusieron en contacto con el Sindicato de Trabajadores Municipales de Pilar (STMP), cuyo titular, el recientemente reelecto Luis Molina, se hizo cargo del asunto.

Según le contó Molina a El Diario, el martes tuvo una reunión con el intendente Nicolás Ducoté para recabar información y tratar de revertir la situación. El referente sindical señaló que el intendente se mostró abierto al diálogo. Y, de hecho, instruyó una nueva reunión para ayer, esta vez con el responsable de Recursos Humanos, Domingo Stroia.  

“Se va a hacer un relevamiento de las faltas y de los que cumplieron bien con sus tareas y se va a empezar a reincorporar”, le dijo Molina a El Diario.  A la vez, admitió que todos habían firmado un contrato por 90 días, aunque espera que puedan volver a trabajar. “Tenemos esperanza que lo que hablamos con Ducoté se cumpla”, dijo Molina.

Jóvenes

La otra tanda de despidos incluyó a 36 trabajadores de un programa especial de empleo para jóvenes. 

El plan Pilar Joven dependía de la Secretaría de Salud y, de acuerdo a lo informado oficialmente, fue desactivado

En un principio, preveía que los jóvenes trabajasen hasta julio, pero luego se prolongó hasta el 31 de octubre. De todos modos, las fuentes consultadas negaron que la tarea de los jóvenes hubiera estado ligada a la campaña electoral. 

“Es un programa para estudiantes jóvenes, que cumplían una jornada laboral de cuatro horas por día, de lunes a viernes, y tenía por objeto desarrollar habilidades laborales”, señalaron. Aunque no se dieron detalles de las tareas realizadas, ejemplificaron con que algunos trabajaban como camilleros y otros en tareas de limpieza. En este caso, desde el gobierno anticiparon que podrían aparecer vacantes para reincorporar a algunos, aunque sin número fijo. 

El dato

La semana que viene se confirmaría si habrá o no reincorporaciones de trabajadores municipal