El martes, la Municipalidad anunció que 58 textiles retomaron sus actividades. Una buena noticia para muchos, menos para los trabajadores de una industria del Parque Industrial Villa Flandria, que están preocupados de sufrir un brote de contagios ante la propagación de la pandemia.

Se trata de operarios de la empresa Swetech, que no para la producción a pesar que varios trabajadores presentaron 39 grados de temperatura y algunos de ellos son familiares o vecinos de personas afectadas por el Covid-19.

Está situación está generando profundo malestar en los operarios que se ven obligados a tener que presentarse a trabajar, pese a tener algunos de ellos síntomas que podrían ser compatibles con coronavirus. De no hacerlo, corren riesgo de perder el empleo.

“A la empresa le habían dado permiso para hacer barbijos solamente en un turno de mañana y con 35 empleados contando personal de mantenimiento. De golpe, consiguieron el permiso para trabajar normal, con las combis viniendo desde Moreno, de Rodríguez, de todos lados para que la gente venga a trabajar”, dijo a EL CIVISMO uno de los trabajadores, cuya identidad mantenemos en reserva a pedido de esta persona por temor a ser despedido.

Al respecto, agregó: “Mágicamente la empresa consiguió el permiso (para volver a producir) un día antes que hable el presidente y cuando estaban hablando de trabajos esenciales”. En consecuencia, la fábrica de capitales nacionales que hace fundas para la automotriz Toyota se encuentra produciendo a todo ritmo de lunes a sábado, en dos turnos de 9 horas cada uno. Un turno de 6 a 15.10 y otro de 15.40 a 1.30 de la madrugada.

“La empresa empezó a funcionar con total normalidad hace dos semanas con todos los empleados, trayendo trabajadores de Moreno, Francisco Alvarez, General Rodríguez de todos lados”, contó el trabajador.

SUBE LA TEMPERATURA

Los trabajadores llegan en combis con capacidad casi completa. Uno de los trabajadores que presentó alta temperatura se trasladaba en unas de esos vehículos junto a otros 15 compañeros, que ahora temen estar expuestos al contagio de un virus que esta semana en Luján tuvo un aumento considerable de casos.

“Se está trabajando como si no estuviera pasando absolutamente nada. Dentro de la fábrica hay medidas de seguridad como máscaras y barbijos, pero están pasando varias situaciones. A los trabajadores nos hicieron bajar la aplicación Cuidar al teléfono para poder circular, pero la semana pasada un operario fue a trabajar con 39 grados de temperatura, le tomaron la temperatura antes de ingresar y lo hicieron trabajar igual. Esta persona había viajado en colectivo con otros compañeros. Durante esa jornada laboral se descompensó, le volvieron a tomar la temperatura y volvió a marcar 39 grados. Lo subieron a un remis, lo enviaron a la casa y la fábrica siguió produciendo”, reveló.

Tras este caso, esta semana la preocupación de los trabajadores fue creciendo. El miércoles, otro trabajador se presentó con 39 grados de temperatura. “Te obligan ir a trabajar, no respetan la aplicación Cuidar. En ese caso, pasó lo mismo: llamaron a un remis y lo hicieron irse a su casa. El operario se desempeña en una línea de producción donde tocan materiales que se van pasando de mano en mano entre otros trabajadores”, detalló la fuente que habló con este medio.

Por consiguiente, generó mayor alarma y más cuando se conocieron que los casos de contagios por Covid-19 aumentaron considerablemente. “Hay trabajadores que tienen vecinos infectados. Es un desastre lo que están haciendo. En los dos turnos hubo personas con fiebre y la solución es meterlos en un remis, enviarlos a la Clínica Güemes o que ellos se las arreglen cuando debería hacerse un hisopado y parar la producción”, consideró el trabajador, que cuenta con el respaldo de varios compañeros.

El grupo de trabajadores apeló a EL CIVISMO para dar a conocer la situación que se vive en la fábrica ya que no encuentra eco en el sindicato. “Con los delegados antes de la pandemia venía todo de 10, pero ahora no se hacen cargo y te dicen que tenés que hablar con recursos humanos. Algo hay atrás…”, sospechan.

“Es el momento que se sepa. A “fulano”, que está en Costura, tenía 38,5 de fiebre y lo mandaron a la casa y acá seguimos trabajando como si nada. Tengo una bronca…”, señaló otro operario.

“(“Mengano”) tiene una sobrina de siete meses con coronavirus, un vecino con coronavirus y está viviendo a trabajar. No sabemos cuántos casos hubo hoy (por el miércoles a la noche) pero están re locos”, dijo otro operario en alusión a la patronal.

A todo esto, los trabajadores ponen en duda la efectividad de protocolos sanitarios que estaría aplicando la empresa. “Lo que la empresa hace es la manipulación de las personas y eso da más bronca. Lo que quieren es que vayas a trabajar. Si tenés fiebre no mandan una ambulancia a tu casa ni respetan el aislamiento. Tenés que ir a la fábrica, presentarte ante el médico con certificados antes de las 48 horas sino no te pagan. Faltás y te descuentan un montón de cosas. Lamentablemente, tenés que trabajar y juegan con la plata de uno. Más de la mitad no quiere ir a trabajar, pero están obligados a ir porque te ponen entre la espada y la pared. Cuando te tocan el bolsillo, te obligan a ir. El mes pasado, hubo trabajadores que cobraron 3 mil pesos porque descontó las faltas de marzo. Es un desastre. Hay muchísima bronca y angustia”, denunciaron.

Este jueves apareció en la pantalla de Crónica TV la madre de una niña que tiene coronavirus. La mujer tiene a dos familiares directos trabajando en Sewtech: un hermano y una hermana que además es delegada y por la tarde se retiró de la empresa con temperatura.

Mientras tanto el malestar no cesa y sus compañeros piden, entre otros reclamos, que se hagan hisopados y permita la empresa el aislamiento preventivo de los trabajadores para evitar caer enfermos. Un conjunto de demandas que, según denuncian, son desoídas desde que la fábrica parece haber recobrado la normalidad pre pandemia.