Los automovilistas que recorren diariamente los puentes que unen esta ciudad con Neuquén se vieron sorprendidos ayer por un corte imprevisto que comenzó a sentirse luego de las 19. La medida fue impulsada por un pequeño grupo de productores, quienes estacionaron unos pocos tractores sobre la ruta e impidieron el tránsito desde Cipolletti hacia la vecina localidad. La gente, imposibilitada de pasar, manifestó su bronca y se descargó contra la Policía, que no encontraba la manera de destrabar la situación y aconsejaba dar la vuelta por Cinco Saltos.

“Tengo una discapacidad y no me dejan pasar. Cortaron justo cuando intentaba pasar, y me dijeron que no pasaban ni los enfermos”, se quejó una mujer que había quedado atascada con su camioneta entre los móviles policiales y las maquinarias.

“La Policía no puede hacer nada, pero tampoco nos puede decir hasta qué hora estarán cortando. Somos rehenes de todo reclamo”, dijo un hombre, mientras fumaba para apaciguar la bronca. Los minutos pasaban y el desconcierto crecía, a la par de los bocinazos de cientos de automovilistas que querían llegar a sus casas luego de una extensa jornada laboral.

La protesta había comenzado sin problemas alrededor de las 9, cuando los chacareros salieron a la calle para reclamarle a Nación el pago de los 190 millones de pesos prometidos en enero. Además, quieren comenzar a discutir en qué condiciones harán la cosecha del próximo año.

Al cierre de esta edición, el corte continuaba y la fila de automóviles se extendía hasta el ACA (sobre Ruta 22) y hasta la altura de la terminal (sobre calle Pacheco). La Policía pedía precaución a quienes decidían retomar el camino por la 151, aunque muchos optaban por dar la vuelta por el barrio Labraña, que tiene salida debajo del puente, a la altura de la Caminera.