El Movimientos Sindical para la Justicia Social y el Trabajo -espacio integrado por 14 gremios que forman parte de la CGT Regional- fue el primero en mover, cuando a principios de junio anunció su respaldo a la fórmula Fernández-Fernández, animado principalmente -según se explicó- por el afán de resistir la Reforma Laboral que impulsa el Gobierno de Mauricio Macri.

Desde luego, no debería descontarse otro factor, como el enojo de Ilda Bustos con Hacemos por Córdoba por haber quedado marginada de la lista que el PJ llevó al cuarto oscuro en las elecciones provinciales. Pero más allá de los motivos que guiaron al “Movimientos Sindical…” a anunciar un juego autónomo del resto de los sindicatos que integran la central comandada por José “Pepe” Pihen, debe entenderse que la movida puso presión sobre el resto de los sindicatos que rechazan las políticas impulsadas por el Gobierno Nacional y que, por otro lado, respaldan al oficialismo provincial.

A partir de entonces, los demás espacios gremiales fueron definiéndose. La CGT Rodríguez Peña de Mauricio Saillen (Surrbac) mantuvo su alineamiento con el kirchnerismo y dejó en el pasado sus acercamientos hacia el peronismo local, después de que Franco Saillen comprendiera que no habría un lugar para él en la lista del PJ; las 62 Organizaciones Peronistas resolvieron sostener su apoyo hacia la boleta corta de Hacemos por Córdoba; y Pablo Chacón (Comercio), invitado de última hora a la boleta del Frente de Todos, trabajará impulsando el espacio que lo lleva como candidato, tal y como lo harán ambas CTA.

Pero este escenario dejaba una gran incógnita que se resolverá hoy: el juego del Movimiento Obrero Peronista.

En este espacio, adelantan, hay dos asuntos totalmente fuera de discusión: el primero, su rechazo rotundo a las políticas de Mauricio Macri; el segundo, su apoyo absoluto hacia la boleta corta que Hacemos por Córdoba llevará al cuarto oscuro el 11 de agosto.

Sin embargo resta por definir si el MOP, que integran todos los sindicatos peronistas que integran la CGT Regional más otros que no forman parte de ésta, trabajará para impulsar el tramo presidencia de la boleta del Frente de Todos, que tiene a Alberto Fernández -ex jefe de gabinete K- como candidato presidente y a Cristina Fernández de Kirchner como candidata a vice.

Para decidir este apoyo (o no) a la fórmula Fernández-Fernández, los sindicatos que integran el MOP realizarán un plenario a partir de las 11 de la mañana. Fuentes que manejan información de primera mano anticipan que una resolución que avale este respaldo parece lo más probable, pero no creen que se trate de un resultado cantado.

Elecciones en la CGT

Mientras el MOP –brazo político los gremios peronistas encuadrados en la CGT (y de algunos otros)- debate su encuadramiento respecto del tramo presidencial de la boleta, ya hay varios anotados para competir por la Secretaría General de la central que comanda Pihen, y que funge como la herramienta institucional que nuclea tanto a gremios de extracción justicialista como a otros de distintos perfiles ideológicos.

Se descuenta que el actual secretario general cegetista buscará retener su cargo y dicen, los baqueanos en el gremialismo cordobés, que es quién parte con ventaja para mantenerse al frente de la central. Sin embargo también se ha subido a la carrera el secretario general de la UOM (Unión Obrera Metalúrgica), Rubén Urbano. Esta postulación cuenta con un aval de gran importancia, el del propio Pablo Chacón, que jugando ahora desde del Frente de Todos por obra y gracia de Sergio Massa, ha escogido a Urbano como su favorito para conducir la CGT Regional.

Finalmente, el secretario general de las 62 Organizaciones peronistas, Sergio Fittipaldi, también ha confesado su interés en terciar por la central. A estos tres candidatos podría sumarse un cuarto, si el Movimiento Sindical para la Justicia Social y el Trabajo decidiera auspiciar a un aspirante propio.

Desde este espacio, liderado por Ilda Bustos (Gráficos), Héctor Morcillo (Alimentación) y Raúl Ferro (Asociación Bancaria), no descartan que este escenario pudiera llegar a presentarse, y dicen estar ahora concentrados en trabajar para que el gobierno de Macri llegue a su fin el próximo 10 de diciembre.

Desde la CGT creen que el juego propio que hasta ahora han elegido los sindicatos que integran el Movimiento Sindical responde a una situación coyuntural, propia de los tiempos pre electorales, pero que “a la larga” prevalecerá la unidad.