En principio, señaló que “se está tergiversando la información” y, ante esto aclaró que “ni desde el Astillero ni desde la provincia de Buenos Aires estamos pensando en una privatización”.

De todas formas, consideró que es necesario salir del “ente administrador, porque tiene el mismo tratamiento que cualquier Ministerio público”, mediante el cambio de una figura jurídica para que la empresa sea productiva.

Esto, explicó, “llevaría a agilizar los pedidos para empezar los trabajos. Por eso, es necesario convertir al Astillero en una empresa cien por cien estatal”.

Y con ello “se pueden hacer grandes obras y construir para nuestro país”, añadió el referente sindical.

De esta manera, aseguró que el estado de los trabajadores “no se vería afectado en absoluto, porque se mantendría el convenio colectivo de trabajo con todas sus actas. Además, desaparecería la posibilidad de una privatización”.

“Estamos buscando que sea una empresa productiva que construya para el territorio nacional”, reiteró, para luego dar cuenta que eso sería “a través de una labor en conjunto para tener una flota propia”.

“Esta nueva dirección se puso al día con todos los proveedores, entre tantas otras cosas para el beneficio de nuestro espacio”, informó luego.

En cuanto a la negativa de ciertos trabajadores, consideró que “esto es una cuestión política, y lamentablemente son los mismos que en el 2018 buscaron que al Astillero le vaya mal. Son quienes primero vienen por el gremio orgánico para luego ir por la empresa. Es una posición destructiva y llena de odio”.

“Está convocatoria está confundiendo y genera incertidumbre en los trabajadores, cuando nosotros lo que buscamos es dejar de lado el individualismo, para ir todos juntos por la defensa del Astillero”, concluyó.