En paralelo a la aceptación que las autoridades de Suteba le dieron a la propuesta salarial del gobierno de Vidal a principios de abril, la agrupación Violeta de General Pueyrredon perteneciente al gremio alzó de inmediato la voz: un descontento generalizado se propagó por diversas escuelas del partido en donde los docentes afiliados aseguraron haber rechazo masivamente la oferta.

El disgusto continuó semanas después, vía un comunicado en el que se renovaron los reclamos por no tener acceso a las planillas en las que cada trabajador definió su posición.

Una semana después de la conferencia de prensa que brindó la gobernadora en la que se selló la rúbrica paritaria del 2019, docentes disconformes con la medida visibilizaron su reclamos con un cartel colocado en el ingreso a la sede del Suteba en Mar del Plata.

En diálogo con 0223, Nancy Giménez de la Agrupacion Roberto Santoro de Suteba Multicolor, no tuvo dudas en definir que lo acontecido “es una de las prácticas habituales de la agrupación Celeste de manejar todo a puertas cerradas”.

Consultada por el pedido de las bases de acceder a las planillas, algo negado por las autoridades del gremio, Giménez afirmó: “Empezamos a dialogar con algunos compañeros docentes de inicial, primaria, secundaria, hasta de la universidad, es decir de todos los niveles, compañeros que hicieron su propio relevamiento en sus escuelas y ninguno tenía nada que ver con la aceptación dada”, sentenció.

En esa línea, la vocera de la agrupación entendió: “La realidad es que estamos plenamente seguros de que hubo una gran cantidad de colegios en los que el rechazo fue masivo y por eso no dan a conocer las planillas”, aseveró.

“Desde la conducción Celeste del sindicato no han hecho ninguna medida de fuerza contundente desde que asumió este gobierno ni tuvieron en cuenta la opinión de los trabajadores de base. Hoy ni siquiera hay reuniones de asamblea, solo reuniones de delegados que se anuncian de un día para el otro, algo inviable porque son muchos los docentes que deben trasladarse de un colegio a otro todos los días y no tienen tiempo de organizarse. Esa es otra de las prácticas que se lleva adelante incluso antes de que asumiera Vidal”, concluyó.