Farmacoop, el primer laboratorio recuperado del mundo, producirá test rápidos y baratos para detectar Covid19

Farmacoop, el primer laboratorio recuperado del mundo, producirá test rápidos y baratos para detectar Covid19

La cooperativa producirá las tiras de diagnóstico rápido de Covid-19 que desarrollaron investigadores de la UNLP. Pasaron de salvar puestos de trabajo a incorporar tecnologías para afrontar una pandemia y expandir el negocio. "Una empresa recuperada con una inversión, que muchas veces es menor a la inversión en una empresa privada, puede ser competitiva".

Por: Ana Flores Sorroche.

Hace un año el laboratorio ex Roux - Ocefa, cerrado desde 2016, pasaba a manos de la Cooperativa de Trabajo Farmacoop LTDA y conseguía el aval de la justicia para continuar con la producción de fármacos. Es la primera empresa recuperada del sector en el mundo gestionada por sus trabajadores. 

InfoGremiales habló con Bruno Di Marco, trabajador de Farmacoop, para conocer la experiencia de mantener a flote una fábrica recién recuperada en medio de una pandemia. La historia cruza algunas virtudes argentinas que cada tanto emergen y articulan: la lucha de las y los trabajadores, la educación pública y la ciencia al servicio del pueblo.

Luego de lograr la habilitación en mayo de 2019, tuvieron que rearmar la planta que había quedado destruida y clausurada tras la retirada de sus anteriores dueños. A mediados de ese año, la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad de La Plata, a través del Director de Empresas Recuperadas del Ministerio de Desarrollo Social, Eduardo Murúa, contactó al laboratorio recuperado "Para hacer algo de transferencia de tecnología, transferencia de conocimientos y trabajar de manera complementaria", recuerda Di Marco.

Pero el 2020 tenía otros planes: "Estábamos por terminar la habilitación para la producción de medicamentos y nos agarró la pandemia." Luego, tras el cambio de gobierno, se juntaron con el viceministro de salud de la provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak, con quien firmaron un convenio para la producción de elementos esenciales para el sistema de salud. "A partir de eso, habilitamos un sector para la producción de alcohol en gel y alcohol al 70 por ciento. Eso nos permitió generar trabajo y retiros para 50 compañeros y compañeras pero todavía tenemos otros 50 compañeros y compañeros para incorporar". 

El contexto que generó la expansión del coronavirus resultó ser una oportunidad en medio de una crisis mundial porque de la producción local de alcohol pasaron a acompañar la investigación científica para crear un test rápido cuyas repercusiones positivas a las cuentas públicas, al sistema de salud argentino y regional y a la población en general todavía son difíciles de calcular.  "Lo último que surgió fue esta propuesta de transferencia de tecnología de un inversor privado de financiar el proyecto que fue desarrollado por el equipo de investigación de Sebastián Cavallito, investigador del CONICET y de la UNLP. La implementación y escalado del proyecto sería en Farmacoop, en un sector que va a estar específicamente preparado para la producción de las tiras reactivas", detalló. Con el inversor formaron una sociedad para financiar la importación de una máquina que les permitirá fabricar 25 mil tiras reactivas semanales.

La prueba consiste en estas tiras reactivas que funcionan como los test de embarazo de venta libre. Es un test serológico que detecta si el paciente estuvo o está en contacto con el virus a partir de la generación de anticuerpos. No requiere un laboratorio de análisis clínico, lo puede realizar cualquier persona en su casa, en un centro de salud móvil, en una fábrica que reabre, en un barrio popular y se puede hacer masivamente. 

A partir de esta nueva tecnología que incorporaron, abrieron una nueva unidad de negocio en los tests reactivos que, ahora están enfocados en el coronavirus, pero con miras a futuro "pueden testear dengue, sika, toxinas y un montón de otras variables."

Por otra parte, la sustitución de la importación de tests, le permite al Estado redirigir el dinero público a otras demandas, que no son pocas. 

"Es un salto cualitativo en cuanto a las aspiraciones que tenemos como empresa recuperada, demostrar que la gestión de los trabajadores de una empresa no tiene que limitarse a la mera supervivencia o a pretender la asistencia constante del Estado sino que con una inversión, que muchas veces es menor a la inversión en una empresa privada, podemos ser competitivos, en términos de mercado pero también en términos de tecnología e innovación.", cerró impecable Di Marco.

Por su parte, los hospitales contarán con el test CovidAr IgG, también creado por un equipo de científicas y científicos argentinos liderado por Andrea Gamarnik en el Instituto Leloir que determina si una persona estuvo en contacto con el coronavirus SARS-CoV-2.

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