Tensión en CGT por doloroso reclamo

Los titulares de la CGT respondían preguntas de la prensa, tras analizar el paro nacional, cuando Marcelo Novillo interrumpió la conferencia y, quebrado, les reclamó. "¿Cuándo van a luchar para que no maten a nuestros hijos?".

En ese punto, el clima en la sede central de la CGT en la calle Azopardo, en el bajo porteño, cambió y se hizo un gran silencio donde el trabajador continuó con sus reclamos. El hombre perdió a su hijo llamado Adrián, de 16 años en junio de 2014 y, desde ese momento, reclama Justicia. La situación es por demás dolorosa, pero quien debe dar respuesta, en este caso, es el Estado y no la CGT, que puede y debe escuchar la demanda.

"Siguen matando 35 chicos por fin de semana. ¿Cuándo van a luchar por eso?", se quejó el hombre y detalló: "Soy un trabajador, era un trabajador pero ahora no puedo trabajar porque me la paso llorando".

"Cuándo van a luchar por nuestros hijos. Cada vez que matan a un chico, matan a un trabajador", prosiguió el hombre ante los gremialistas que se mostraron sorprendidos por el pedido. "A mi hijo lo mataron ¿Quién lo defiende? Ustedes no le reclaman al Estado que no nos maten a nuestros hijos. Peleen por la vida", exclamó entre sollozos el hombre.

Hace dos años y medio, el 16 de junio de 2014, varios hombres le propinaron una fuerte golpiza a su hijo a la salida del boliche Space, en Quilmes Oeste. El adolescente fue intervenido quirúrgicamente tres veces y murió 14 días después en un hospital de ese partido bonaerense. Hoy no hay ningún detenido por el crimen. El de hoy fue uno de varios intentos desesperado por pedir Justicia.

El 12 de febrero pasado, Marcelo Novillo se trepó a la cúpula de la confitería El Molino, en el barrio  de Congreso, y amenazó con tirarse. Fue necesario todo un despliegue de seguridad para bajar al hombre, que mantuvo en vilo a los vecinos por al menos dos horas. Ese había sido el último de varios intentos desesperados del hombre para exigir justicia en el caso de su hijo.

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