Por: Claudio Garibotto.

Una explotación total. Eso es lo que viven los trabajadores de la sucursal 144 de Carrefour, ubicada en 12 y 57, en La Plata. Aunque desde el 24 de noviembre la tienda abre las 24 horas, falta personal y, por eso, sobrecargan enormemente el trabajo de los empleados. Además, la empresa no brinda la posibilidad de hacer horas extras “para tapar los huecos”, como le explicó Sebastián Rojo, delegado de la sucursal, a Gestión Sindical.

Por otra parte, agregó que “el gerente dice que estamos operativos mientras explota la línea de cajas sin tener personal. Y lo mismo pasa con el pequeño depósito que tenemos. Lo que planteamos para solucionar esto no es que tomen más gente, sino que aumente los contratos a 48 horas, ya que hay cinco compañeros de media jornada que quieren pasar a trabajar 48 semanales. Pero no les dan oportunidad de mejorar sus salarios”. Y analizó: “Esto es sólo por conveniencia de la empresa, que va a tomar sólo tres empleados más por agencia y por cuatro horas. Mientras, los compañeros terminan trabajando por todos los ausentes”.

En ese sentido, Rojo precisó que hay “tres compañeros con retiro voluntario acordado con la empresa; dos con licencia por maternidad; una compañera de agencia que renunció; y tres compañeros que pasaron a turno madrugada. Además, uno de ellos trabaja a la tarde y a la madrugada sin cumplir las 12 horas de descanso que, por Ley, tiene que haber entre el fin de una jornada y el inicio de la siguiente”. Eso es lo que explica la falta de personal, aunque “por más que lo planteamos, nunca contestan ni resuelven nada”, dice. Y compara: “El Carrefour 109, de calle 7 y 47, no abre las 24 horas por falta de personal. Pero acá sí porque estamos «operativos», según dicen. Aunque claro, eso es gracias a que los compañeros son sobreexigidos en sus labores”.

La empresa, como explicó el delegado, no tomó ninguna medida real para solucionar el problema. Por el contrario, se comunicó con el Sindicato de Comercio de La Plata para desmentir la situación. “Además personalizaron la situación contra mi persona diciendo que yo miento, cuando yo lo único que hice fue hablar a favor del bienestar y el buen desenvolvimiento de las tareas de mis compañeros”, explicó Rojo. Y contó que la única respuesta concreta de la sucursal fue “autorizar una persona más, de 24 horas y por 30 días, para cubrir las Fiestas. Pero es claro que no se puede tapar el sol con un dedo, y dejamos en claro a la empresa que el pedido no es la incorporación de nuevo personal eventual sino la suba de contratos para los compañeros que lo solicitaron y horas extras para quienes los precisen”.

El delegado también contó que “el gerente del local citó el viernes pasado a los compañeros para preguntarles si alguno se sentía explotado. ¡Obvio que nadie habló! ¿Quién lo haría en un apriete de tal magnitud adelante de todos? Es impresentable el manejo que hay en el local a nivel gerencial, y en la empresa misma, tratando estos asuntos”. Esa reunión, dice Rojo, “se hizo un día que yo tenía franco, para así poder llamarme mentiroso e hipócrita. Da mucha bronca e impotencia toda la situación, ya que tenemos una baja de 360 horas semanales en los turnos mañana y tarde. Nosotros empezamos el 19 de marzo con 924 horas semanales en líneas de caja, entre turno mañana y turno tarde. Y hoy estamos en 564, lo que representa un 40% menos de horas trabajadas efectivamente”.

Por otra parte, contó otra situación de conflicto con la empresa: “Se pidió que reduzcan un poco los pedidos de mercadería, ya que tenemos un deposito muy pequeño y suelen entrar diariamente dos camiones de la casa, además del resto de proveedores pequeños y también Coca-Cola y Quilmes, que suelen traer bastante mercadería. Y eso implica que los compañeros estén sobreexplotados de trabajo en el salón y el depósito quede anulado, sin mencionar que pasa lo mismo en el sector de frescos, donde la merma es todavía mucho mayor, generando pérdidas a la empresa para que después “no le cierren los números” y no puedan pasar compañeros a jornada completa, dar horas extras, o hacer algún arreglo estructural en el local, que muchas veces no se hacen por “falta de presupuesto”, produciendo desventajas e inconvenientes a la hora de realizar el trabajo los compañeros”.

Por el momento, además de la denuncia de la situación en los medios de comunicación, se realizan manifestaciones en la puerta de la sucursal. El objetivo es visibilizar el reclamo y esperar que finalmente la empresa tome medidas concretas y ciertas para solucionar los problemas. Algo que parece estar lejos de ocurrir.