En lo que va del año, los argentinos llevan gastados casi $ 40.000 millones en los diferentes servicios que ofrece la telefonía celular. Es decir, en llamadas telefónicas, envíos de mensajes de texto, uso de Internet, videos y otras aplicaciones entre las cuales también se encuentran las redes sociales. La cifra surge de sumar a los $ 23.219 millones que se habían gastado hasta junio, otros $ 16.000 millones que se agregaron entre julio y lo que va de este mes. Además de ser exorbitante, el número representa una suba de casi un tercio con respecto al mismo período de 2012 y evidencia la cada vez más dependencia de los argentinos por su celular, ya convertido en un bien imprescindible, irremplazable y que, obviamente, es la principal fuente de ingresos de las operadoras locales.

De hecho, en el país ya existen 58 millones de líneas de celulares, según el Indec, superando a la cantidad de habitantes y ni que hablar a la de teléfonos fijos. Los números también muestran el fuerte nivel de ingresos de las telefónicas, con ganancias que el año pasado superaron los $ 10.000 millones.

Y, en un escenario de crisis de espectro, con licitaciones que se anulan, una empresa estatal anunciada pero inexistente aunque que se sigue reservando el 25% del mercado, la cifra evidencia las razones del mal servicio que sufren los usuarios.

Parte de estos datos pertenecen al estudio Mavam Argentina 2013 que elabora todos los años la empresa Acision, dedicada a los servicios de mensajería móvil. El trabajo estima que las ventas por el uso de Servicios de Valor Agregado (SVA) llegaron a $ 10.212 millones en estos primeros siete meses, impulsadas por los SMS y el acceso a Internet. Por caso, Internet móvil generó ingresos por $ 2.433 millones, con un crecimiento de 50,97% en relación a 2012.

Es así como los SMS, junto a los mensajes multimedias como videos o fotos (MMS) siguen siendo los principales generadores de ingresos: representan el 56,8% de las ventas de servicios equivalente a $ 5.841 millones. De hecho, generan el 49,4% de las ventas totales de los operadores. Para tener noción de su crecimiento, hace cinco años sólo eran el 6%.

Además, de acuerdo a Mavam, el 93% de los usuarios de smartphones sigue usando los SMS. Y en el caso de las mensajerías instantáneas, las más elegidas son WhatsApp (77%); Facebook (56%) y Twitter (28%). Sin embargo, el trabajo revela que el 93% de los usuarios también incorpora el SMS. Es decir, el mensaje de texto y los servicios de mensajería instantánea coexisten y resultan ser soluciones complementarias entre sí.

Al respecto, Fátima Raimondi, vicepresidente y Gerente General en Latinoamérica de Acision, sostuvo que en el país los SMS “aún son vistos como el principal servicio de mensajería. Por ejemplo, el 60% de los usuarios consideró que ante una hipotética eliminación del SMS tendría dificultades de comunicación. Otro 22% se sentiría perdido. El 38% de los encuestados lo necesitaría aún teniendo otras alternativas de comunicación”. Entre las razones por las que los usuarios de smarphones prefieren utilizar los servicios de mensajería aparece la variable de costo, citado por el 70% de los consultados. En tanto al 56% también le interesa poder compartir archivos, imágenes y videos. “El usuario seguirá utilizando múltiples plataformas de mensajería para satisfacer sus necesidad de comunicación”, explicó Raimondi.